Capitulo 34

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¿Por qué tendría que aceptar el beso? — contrataco Bennett — no debería pasar eso entre nosotros

Creo que un beso no se le niega a nadie — continuo Sabrina con un tono coqueto — pero entiendo que no aceptes quizás

No es lo correcto, además esta Harrison — comento cruzándose de brazos aun nublado por los celos — la balada que hicieron juntos seguramente habla de ustedes

Si te soy honesta — hablo con algo de ironía al recordar una serie de cosas que usaría en contra de su acompañante — no parecía incomodarte compartirme con Harrison sobre todo cuando me besabas

Eso es jugar sucio — señalo a la chica con una pequeña mueca — sin embargo, sigue siendo incorrecto

Es por la balada — la peli azul chasqueo sus dedos — si bien la canción es romántica, es bastante idílica, una fantasía — tomo su teléfono para reproducir la canción — te lo voy a confirmar

La canción se empezó a reproducir, aunque al principio el chico se mostraba raseó termino disfrutando de la balada, sus celos se esfumaron con la última armonía de la canción y una sonrisa aprecio, la chica al ver el cambio también se alegró pues sabía que su acompañante había resuelto sus dudas.

Te lo dije — apago su celular y lo guardo — deberías hacerme caso más seguido

No cambiaras mi posición, besarnos es incorrecto — hablo de una manera un poco seria — por cierto, quiero grabar la balada

Lo entiendo, pero en algún momento tendremos que hablar de todo — miro al chico quien mantenía esa expresión seria — no sabes cuanto me alegra saber eso

La peli azul prendió su celular para escribir a Harrison confirmando que la canción podría salir, después de ello dejo su celular, puso algo de música en el auto el cual ya se había pues en camino a la casa de la peli azul. Unos minutos pasaron hasta que los dos chicos se vieron embotellados por el tráfico ante eso la peli azul aprovecho en conectar su celular y poner música en su versión de karaoke para que pudiera ponerse a cantar, al principio el chico la veía incrédulo, pero pronto ambos se encontraban cantando a todo pulmón sin importarles mucho que los conductores les pitaran pues aún no se podían mover, cuando por fin les dieron pase ambos recobraron la compostura aunque en sus rostros había una hermosa sonrisa, cuando llegaron al departamento de la peli azul las chicas la esperaban con uno de sus postres favoritos, también había una figura masculina junto a ellas al ver bien de quien se trataba se emociono pues era Harrison, los dos chicos bajaron del auto y saludaron a todos los que estaban ahí.

Ya dentro de la casa la peli azul se dio cuenta que también estaban las parejas de sus amigas ayudando con la preparación de los postres favoritos de sus novias, ante ello un pequeño hincón se hizo en el corazón de la peli azul pues se imaginaba a ambos preparándole aquel postre con el cual la habían recibido sus amigas, claro que agradeció el gesto de las mismas pero era toda una romántica así que aquello si le había causado esa leve tristeza que luego se borró cuando la invitaron a jugar cartas, pues ella era buena jugando cartas así que el juego empezó de una manera bastante tranquilas hasta que ella misma convirtió aquello en una competencia, así pasaron la mayoría de la tarde hasta que las parejas se retiraron pues habían decidido tener una especie de cita grupal.

Bueno, ¿quién quiere beber? — hablo Sabrina desde la cocina sacando unas cuantas botellas de soju —

Me parece una gran idea — comento Briana, caminando hasta Sabrina para ayudarla con las botellas —

Ambas chicas llegaron con los demás los cuales ya tenían preparado el ambiente retirando la mesa de centro para tener un espacio un poco más grande, unos segundos después la peli azul había abierto la primero botella y ya estaba repartiendo un poco a cada uno de los individuos que estaban ahí, así fueron pasando las rondas de botellas por lo que llego un punto donde a algunos los recostaron en los sillones pues se notaban bastante mareados, cuando terminaron con eso Sabrina se dispuso a ir a su habitación pero fue detenida por sus amigos quienes parecían querer hablar con ella, lo que era poco coherente pues estaba alcoholizados y nada bueno saldría de eso, pero aun así quería tener esa conversación, los guio al dormitorio pues ella ya estaba cansada y si hablarían seria en la comodidad de su habitación, cuando llegaron la chica se sentó en su cama, les dijo que imitaran su acción para que pudieran charlar, aunque las bromas se hicieron presentes.

Se siente como un deja vu — comento Sabrina quien estaba al centro — porque ya se lo que va a pasar

Esta vez nadie nos detendrá — intervino Bennett mirando a sus dos acompañantes con complicidad —

Seremos solo nosotros — Harrison hablo mientras miraba los labios de Sabrina —

Los tres chicos estaban envueltos en un ambiente seductor, de complicidad y confidencia, por lo que no se podían separar sus cuerpos solo querían sentirse entre sí, no podían pensar en nada más por lo que en poco tiempo Harrison y Sabrina empezaron un beso mientras Bennett se encontraba saboreando la tersa piel del cuello de Sabrina, una vez se terminó el beso de Harrison y Sabrina, los dos chicos cambiaron de labor, esta vez Bennett saboreaba los labios de la peli azul mientras Harrison besaba su cuello y empezaba a desnudarla, no solo las prendas de Sabrina desaparecían también la de los chicos, por lo que en unos minutos los chicos ya estaban casi desnudos los único que cubría sus cuerpos eran las bragas de Sabrina y los bóxers de los chicos, pronto se perdieron en las sábanas en ese momento ya se contemplan completamente desnudos, aquellos tres se encontraban explorándose sin pudor, lo único que pasaba por sus mentes era disfrutar ese momento el que parecía un recuerdo valioso al igual que lascivo.

Por parte de los demás miembros en la casa aquello fue una tortura pues ninguno de los tres se esforzaba en ocultar lo que estaban haciendo, sin embargo el alcohol que traían en las venas los obligo a descansar, aunque uno de ellos les aviso a los que habían salido que no sería una buena idea legar a la casa de las chicas. 

Un Instante Para Siempre #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora