Un Instante Para Siempre #1

Capitulo 43

Ya habían pasado unos días donde las tensiones habían disminuido, en realidad, no se habían tocado se pensó que era lo mejor pues cada una tenía una manera diferente de ver las cosas Maia y Mara trataron de poner una buena cara pues en las mañana tenían ensayos grupales por lo que ahora estaban en el estudio de baile puliendo la coreografía que en menos de una semana presentarían en su rueda de prensa, una rueda de prensa que cambiaría sus vidas y por la que habían estado luchando, aunque ambas chicas parecían distraídas por momentos, eso lo demostraban perdiéndose en la coreografía o adelantándose lo suficiente como para que se vea disparejo, ante ello su coreógrafa les dejo un momento de descanso, al notar estos fallos Sabrina se vio obligada a involucrase no como amiga si no como líder, por lo que su postura cambio al igual que su tono de voz, demostrando que ya no era su amiga era su líder, era lo que en ese momento necesitaban.

Hace poco dije que la comunicación era importante en cualquier relación - empezó a hablar soltando una suave risa casi irónica - y parece que no lo he podido practicar

Decirlo es fácil - hablo Mara - practicarlo es complicado

Existen cosas que van a ser complicadas, pero si dejamos que interfieran de manera negativa, no lograremos nada - animo Sabrina - todas hemos luchado por este sueño, no deberías dejar que los problemas se interpongan

Lo dices, porque aún no hablas con ellos - murmuro Mara, tornándose algo seria -

No he hablado con ellos sobre eso, porque fue una decisión de los tres - alego la platinada, algo incomoda al exponer esas cosas - pensé primero en el debut, todas deberíamos hacer lo mismo

Son las consecuencias de jugar con fuego - hablo Mina con un tono de superioridad, lo que molesto a sus compañeras -

Creo que no deberías opinar - contraataco Cora - nadie pidió mas participaciones

Antes de poder si quiera pensar en una confrontación, la coreógrafa intervino culminando con su break, cuando la música volvió a sonar las todas trataron concentrase en dar lo mejor pues sabían que aquí estaba todo su esfuerzo, el ensayo paso con normalidad, pero al aun encontrar tensión en el grupo, por lo cual las miembros tomaron diferentes caminos.

Sabrina se quedó sola en la sala. Aprovechando el espacio para sí misma, puso una melodía suave y comenzó a moverse al ritmo, improvisando pequeños pasos. Cuando le gustó lo que había creado, sacó su teléfono para grabarlo. Después de varios intentos, subió el volumen de la música y se dejó llevar por los pasos que le habían gustado, sintiéndose momentáneamente libre. Justo al finalizar su coreografía, un sonido de aplausos la sorprendió. Giró rápidamente, y cuando reconoció la figura, se puso nerviosa, aunque lo disimuló con una sonrisa arrogante. Desde la perspectiva del pasillo, la música había captado la atención de Bennett, quien estaba en la empresa coordinando una reunión con Harrison. Aprovechando la oportunidad, decidió acercarse a Sabrina. Al entrar, la observó bailar con una libertad y alegría poco usual en ella, lo que le contagió una sensación de felicidad.

¿A qué debo la visita? - hablo con algo de arrogancia - no creo que vengas a practicar

Razón no te falta - confeso Bennett mientras se acercaba a la chica - no vine a bailar, pero al verte creo que puedo acompañarte, claro si tú me dejas

Creo que ya es algo para pedir ese tipo de permisos - bromeo la fémina -

Ambos rieron por lo mismo entendiendo el trasfondo de la broma, Bennett se quitó la casaca que traía, estiro cortamente, posteriormente se acercó a Sabrina, quien puso nuevamente la música, y ambos tomaron sus posiciones. Al ritmo de la suave melodía, Sabrina comenzó a moverse con fluidez, guiando a Bennett con gestos suaves pero precisos. Él la seguía de cerca, sus pasos reflejaban la energía de Sabrina, aunque agregaba su propio toque, algo más suelto, menos calculado. A medida que avanzaban en la coreografía, sus movimientos parecían un diálogo sin palabras: ella marcaba el ritmo, él respondía con precisión, aunque de vez en cuando intentaba sorprenderla con una vuelta inesperada o un pequeño giro. Sabrina, acostumbrada a llevar el control, aumentó la dificultad con una secuencia rápida, obligando a Bennett a esforzarse por seguirle el paso. Él sonrió, sin dejarse intimidar, disfruto del reto silencioso que le imponia Sabrian, ambos ajustaban sus cuerpos a la cadencia de la canción.

En un momento dado, ambos giraron al unísono, sus cuerpos perfectamente sincronizados, hasta que ella lanzó una pirueta que terminó con ellos cara a cara. Bennett la tomó suavemente por la cintura, estabilizando el giro, y durante unos segundos, se mantuvieron inmóviles, mirándose a los ojos, con sus respiraciones agitadas pero en sintonía, de un momento a otro la música termino ambos se quedaron frente a frente, sus respiraciones estaban agitadas y en sus rostros se veía una sonrisa de complicidad, lo que llevo a que en un momento dado uno de los brazos de Bennett abrazara la cintura de Sabrina acortando el espacio que quedaba entre ellos, por parte de la chica ella se sentía acogida en los brazos de Bennett pero sabía que no debía caer, aun tenían cosas pendientes, cosas que se complicarían si continuaba el juego, aunque estaban a unos milímetros del otro Sabrina puso su dedo índice sobre los labios de Bennett.

Aún tenemos cosas pendientes - murmuro bajo, lo suficiente como para que su contrario escuchara - ya es momento de resolverlas, pero no así

Lo respeto - contesto el chico, retiro el dedo de la plateada de sus labios y solo la abrazo - es hora de resolver las cosas

Con esta afirmación la chica correspondió el abrazo de Bennett, unos segundos después se separaron con la promesa de que arreglarían las cosas que venían arrastrando de su pasado se despidieron tomando caminos diferentes, Sabrina iba a salir de la empresa mientras que Bennett iba a preparar una sorpresa junto a Harrison, para el grupo de la chica que había llegado a darles unos cuantos líos que disfrutaban descifrar.

En cuanto a Sabrina ella había tomado sus cosas, con una sonrisa salió del estudio caminando hasta encontrarse con Cora quien se había quedado para ver a Asher, el cual ya se había despedido de ella para ir a hacer sus cosas, cuando ambas chicas estuvieron juntas, mantenían una sonrisa que delataban sus sentimientos, por lo que Cora tomo la iniciativa de hablar.

Al parecer quedarse tiene sus beneficios - bromeo dándole un pequeño golpe a Sabrina - ¿quieres contarme?

Esta vez no - hablo Sabrina absorta en sus pensamientos - esta vez quiero atesorarlo sin pensar en las consecuencias

La pelirroja respeto las palabras de su amiga, así que solo la abrazo y guio a la salida pues empezarían su camino a casa para reunirse con las demás miembros, su camino a su apartamento fue de media hora, cuando llegaron estaban riendo, pues habían tenido algunas anécdotas en el camino, por lo que no pensaron que el ambiente tenso de su apartamento seria como un balde de agua helada, en ese momento todas las chicas estaban en la sala y cocina a lo que entendieron que era momento de charlar, de dejar ir esas cosas que las carcomían, por lo que ambas tomaron posturas un poco más serias.

Llego el momento -hablo Sabrina tomando asiento en un mueble libre - ¿quién desea empezar?

Yo - hablo la chica con cabello color menta, llamando la atención de todas - la única condición para hablar es que quiero que realmente hablemos de todo

Las cinco chicas estuvieron de acuerdo con las palabras de Briana a lo que pronto estuvieron todas juntas en su sala, el ambiente era aún tenso, pero tenía pequeños destellos de curiosidad, después de todo era una experiencia nueva y claro todas querían hablar sobre las cosas buenas, pero también de las malas.