El enigma de Harry Black //Drarry//

Capitulo 4

Harry y Luna cruzaron el puente de piedra que conducía al castillo, sumidos en un silencio cómodo. Harry parecía relajado, pero su mente trabajaba rápidamente, ya había hablado con Luna, ahora tenía que hablar con el profesor Flitwick sobre su varita.

Mientras tanto, Draco Malfoy y Pansy Parkinson los observaban desde una distancia prudente, intentando descifrar el cambio repentino en Harry.

"¿Qué está pasando con Black?" susurró Draco, su voz llena de curiosidad.

Pansy se encogió de hombros.

"No lo sé, Draco. Pero estoy segura de que no era amigo de Luna."

Draco frunció el ceño.

"Eso es obvio, por eso los seguimos, pero no es todo. Algo no cuadra. Black no es el mismo."

Pansy se rió.

"Quizás ha aprendido a controlar su temperamento."

Draco la miró con escepticismo.

"No, hay algo más. Y voy a descubrir qué es."

Mientras tanto, Harry y Luna se separaron en el vestíbulo del castillo. Harry se dirigió a su siguiente clase, Hechizos, con el profesor Flitwick.

La clase fue intensa, pero Harry ya conocía la mayoría de los conceptos. Se concentró en los detalles más avanzados, buscando ventajas que podría utilizar en el futuro.

Al final de la clase, Harry se acercó al profesor Flitwick con una mueca.

"Profesor, tengo una pregunta."

Flitwick asintió.

"¿Qué necesitas saber, Harry?"

"Mi varita, me preocupa que no esté funcionando óptimamente." Dijo Harry. "¿Hay algo que pueda hacer para mejorar su rendimiento?"

Flitwick se sorprendió.

"¿Preocupado? ¿Qué quieres decir?"

Harry sonrió.

"Simplemente que busco explorar su potencial al máximo."

Flitwick examinó la varita con cuidado.

"Todos sabemos sobre la varita de sauce llorón... Es una varita muy poderosa. Puede que tu magia no esté bien entrenada para manejarla."

Harry asintió, su mente trabajando a toda velocidad. Ya recordaba esa varita, la varita de Voldemort.

"Entiendo. ¿Qué sugiere que haga?"

Flitwick sonrió.

"Tienes que sentir bien tu magia, concentrarte en ella. La varita te responde si tú le respondes a tu magia."

Harry sonrió, su rostro iluminado por una comprensión instantánea.

"Gracias, profesor."

Mientras se alejaba, Harry pensó en la varita de sauce llorón. La varita que le había causado tantos problemas anteriormente, estaba en su poder. Una sonrisa satisfecha apareció en su rostro, tenía un pendiente menos.

Harry se dirigió al comedor, disfrutando del tiempo libre después de la clase de Hechizos. Decidió sentarse en una mesa alejada, observando a los estudiantes mientras comían y charlaban.

Se sumergió en sus pensamientos, analizando la información que había recopilado hasta ahora. La varita de sauce llorón, la actitud de Draco, la relación con Luna... Todas estas piezas del rompecabezas comenzaban a encajar en su mente.