Capitulo 11: lo impensado

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Kyojuro por fin te había encontrado. En esa habitación fría, húmeda y oscura. Estabas atada de pies y manos. Tenías una cinta en tu boca, impidiendo que pudieras hablar o decir algo. Apenas lo viste, comenzaste a llorar y te pusiste inquieta. Intentabas levantarte, pero no podías mantener el equilibrio.

Tranquila, Haruka.- Kyojuro corrió hacia ti.- ya estoy aquí, no voy a permitir que te ocurra nada malo.

Mmmjjjj mmmmm!!!.- era todo el sonido que podías emitir, por lo que Kyojuro te quitó la cinta con cuidado de no lastimarte.- vete!! Tienes q irte.- gritaba en llanto...por favor vete Kyo!!

No puedo hacer eso..ven.- mientras desataba las cuerdas.- te sacaré de aquí

Salieron caminando por el mismo lugar que habían entrado. Lo extraño era que Tomioka no aparecía por ningún lado

Kyo, esto es extraño.- mencionaste sumamente exaltada.- algo no está bien..el no lo puede haber dejado tan fácil

Pues no lo hice.- esa voz a tus espaldas hizo que te quedarás petrificada. Ambos se dieron vuelta para ver a Tomioka con un rostro completamente vacío, sus expresiones eran aún más frías que antes

G~giyu.- tartamudeaste al decir su nombre.- por favor, deja que Kyojuro se vaya. Haz lo que quieras conmigo, pero no lo lastimes a el

Que estás diciendo Haruka!!?.- grito Rengoku

Eso no sería divertido.- mencionó Tomioka sonriendo burlonamente.- además mí venganza consiste en hacerte sufrir, lastimando a quien más quieres

De qué estás hablan....- no pudiste terminar de hablar. Tomioka saco una pistola, apuntando directamente a la cabeza de Rengoku.- no! Giyu, por favor..no lo hagas... déjalo ir! Haré lo que me pidas, pero no lo lastimes a él

Mientras ustedes estaban adentro y tu decías todo eso, el equipo de la policía estaba escuchando todo. Pero no era el momento ideal para ingresar, ya que cualquier movimiento en falso podía ocasionar una masacre.

Entonces, hará lo que yo quiera?.- repitió Tomioka dejando notar que estaba pensando algo macabro.- de acuerdo, ven conmigo y agarra ésto.- tomó la pistola por el cañón dejando la empuñadura libre para que tu la agarres.- yo no le haré nada a tu querido amigo...tu misma te encargarás de acabar con el.- esbozó una sonrisa maliciosa.- ese será tu mayor sufrimiento por el resto de tu vida

Tu te acercaste, tomaste el arma. No podías parar de llorar.- lo siento mucho Kyo...por favor perdoname por lo que voy a hacer.- las lágrimas britavan de tus ojos como cascadas.- prométeme que si nos encontramos en otra vida, estaremos juntos.

Kyojuro, que ya había comenzado a llorar, te miraba con el amor que desbordaba sus ojos.- claro que lo prometo.- su semblante era tranquilo, dentro suyo sabía que estabas planeando algo.- pero antes que dispares, necesito decirte algo.- te miro profundamente a los ojos.- es algo que jamás me atreví a decirte, pero la situación lo amerita.- tu no parabas de llorar.- Haruka, te amo. Te he amado toda la vida desde que nos conocimos.- al escuchar esas palabras tu llanto se intensificó.- por favor, no te sientas angustiada por lo que vas a hacer..así es como deben terminar las cosas.- tu lo estabas apuntando con el arma, pero tu mano temblaba demasiado.- prometo encontrarte en nuestra próxima vida

A todo ésto, los agentes ya estaban preparados para ingresar y así evitar una tragedia. Estaban dirigiéndose al lugar con cautela, cuando de pronto se oyó un disparo que resonó como un cañón por la acústica del lugar. Al oír ese sonido, Uzui y Sanemi bajaron del coche y comenzaron a correr hacia el interior de la fábrica, por lo que ingresaron junto a los policías, encontrando en la escena a ti arrodillada en el suelo, llorando con el arma en la mano. Kyojuro parado, inmóvil, pálido y con los ojos terriblemente abiertos por la impresión de lo que habías hecho. Y Tomioka, arrojado en el piso, aún consciente, con una herida de bala que no paraba de sangrar en su abdomen. Rápidamente llegó el sistema de emergencias médicas para atender al herido y fue trasladado de urgencia al hospital.

/ MINUTOS ANTES \

Lo siento kyo.- pero no hay otra manera de terminar con ésto.- prometo que te haré feliz en otra vida.- cuando terminaste de decir eso, levantaste tu brazo que sostenía el arma, pero al mismo tiempo te giraste hacia Giyu, presionando el gatillo, haciendo que el proyectil saliera en dirección hacia donde el estaba, sin darle tiempo a reaccionar, dándole justo en el estómago. Sabías usar armas, desde pequeña, antes que tus padres muerieran en un trágico accidente causado por mafioso al que investigaban, tu padre solía llevarte a practicar tiro al blanco, costumbre que conservaste siempre. Luego de su muerte seguiste yendo periódicamente a perfeccionar tu puntería. Sabías que algún día estarías frente a ese mafioso, o en si defecto, frente a su hijo. Y así sucedió, como obra del destino, estaba ocurriendo exactamente uno de los escenarios que tantas veces habías imaginado. Pero algo era seguro, no ibas a permitir que alguien más saliera herido por protegerte.


Maldita sea.- Gruñó Sanemi.- iba a romperle la cara a ese hijo de puta, pero Haruka me ganó de mano

Shinazugawa.- recriminó uzui.- no es momento para esos comentarios

Tcs.- chasqueo la lengua.- no me di cuenta..lo siento


Kyojuro se acercó a ti lentamente.- Masachika ya te había quitado el arma pero aún estabas en shock.- Haru, me escuchas?.- Rengoku se agachó para estar a tu altura.- ya todo acabó, relájate

Levantaste la cabeza y lo miraste a los ojos.- Kyo, yo.- comenzaste a temblar.- tomo maté...a Giyu...está muerto, yo le disparé y el cayó al piso...lo maté.- comenzaste lentamente a elevar el tono de voz mientras temblabas y llorabas.- Kyojuro yo lo mate!!!!! Aaaaaaaa.- soltaste un grito desgarrador

Tranquila Haruka por favor.- miro a los otros dos.- Sanemi Uzui, ayúdenme!!

Ambos corrieron a socorrerte.- Masachika necesito un médico aquí y ahora!.- gritó Sanemi

Minutos después otra ambulancia arribó al lugar. El médico te inyectó un sedante para que te calmes y puedas dormir. Te trasladaron al hospital para tenerte controlada por si intentabas dañarte a ti misma. Por supuesto Kyojuro fue a tu lado en la ambulancia, mientras que Sanemi y Tengen los seguían en el auto. Cuando despertaste viste a Kyojuro dormido en una silla, con la cabeza apoyada en la cama y agarrado de tu mano. No pudiste evitar recordar su confesión y sonreiste. Suavemente acariciarte si cabello, con cuidado de no despertarlo. Habían vivido un evento sumamente traumático y sabías que el también necesitaba descansar. A los pocos minutos, entró el médico para ver cómo estabas.

Si novio es todo un caballero señorita.- comentó el doctor.- no se ha movido de su lado ni un solo segundo

Me podría decir que hora es?.- preguntaste

Son las 4 de la mañana.- respondió amablemente el médico

Kyojuro se despertó y vio que estabas despierta también.- Haru, como estás? Te duele algo? Llamo al médico?.- una pregunta tras otra

Tranquilo kyo.- respondiste.- estoy bien, no me duele nada.- desviaste la mirada.- solo estoy preocupada.- volviste a mirarlo.- sabes algo de Tomioka?

Kyojuro se quedó en silencio por unos minutos que parecían eternos.- Haruka, la herida de Tomioka era muy grave...el perdió mucha sangre.- tus ojos se aguaron. Sabías que si Tomioka había muerto, irías a prisión quien sabe por cuánto tiempo. Al fin y al cabo, igual iba a lograr su venganza.- los médicos los operaron de urgencia, y está en observación..aún no hay novedades

Respiraste un poco aliviada. Solo quedaba rogar por un milagro

Señorita Tsugumi?.- preguntó un hombre que entro a la habitación.- necesito hacerle una preguntas.- dijo mostrando una placa que lo identificaba como policía.- si le parece bien, comencemos ahora


                              --CONTINUARA--

Tomioka y Haruka: El Nuevo Profesor De Educación Física Donde viven las historias. Descúbrelo ahora