Superman en Solo Leveling/Nivelación en Solitario

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(Punto de vista de Sung-Jin Woo)

"Si no tienes en cuenta mi fuerza y ​​regeneración ligeramente anormales, es vergonzoso incluso llamarme cazador". Caminando por la línea peatonal, pensé para mí mismo.

"Dentro de una mazmorra, siempre me lastimaba, e incluso tuve experiencias cercanas a la muerte". Seguí caminando.

"El trabajo en el que tu vida está en juego, el Cazador... No estoy haciendo esto porque me guste"

"Apenas pago las facturas médicas de mi madre enferma con lo que me paga el Gremio de Cazadores. Para una persona normal sin ningún talento en particular, no tuve más opción que convertirme en cazador"

Finalmente, llegué a un sitio en construcción, donde una puerta giraba en el interior.

"¿Por qué tengo que vivir esta vida...?" Suspiré, una de las razones por las que elegí convertirme en cazador fue por mi ídolo, Superman.

Él me salvó en ese entonces, cuando mi hermana y yo casi fuimos secuestrados por traficantes de niños.

Desde que mi padre murió en una mazmorra de rango S, y mi madre, que cayó en una enfermedad incurable que apareció cuando aparecieron las Puertas, el Sueño Eterno.

"¡Ey! ¡Sung, llegaste!" Un hombre me saludó cuando entré.

"Hace frío ahí fuera, ¿no? ¡Buen trabajo!" Aunque el hombre parece que me estaba cuidando, la burla en sus ojos muestra sus verdaderas intenciones.

Casi todos en este lugar se burlaban y chismeaban sobre mí a mis espaldas.

"¡Jaja, no es nada, estaré en tus manos hoy también!" Me reí y respondí.

No es como si pudiera decirles que se retiraran o algo así, después de todo, era conocido como...

"Mira, es el cazador más débil del mundo"

Sí, soy el cazador más débil del mundo.

Soy tan débil, que casi muero en una puerta de rango E. Incluso los cazadores novatos podrían asaltar puertas de rango E con solo uno o dos rasguños.

Ignoré a todos los que me rodeaban y finalmente llegué a la cafetería.

"Hola, ¿puedo tomar una taza de café?"

"¡Ah, cazador Sung Jin-Woo! Se acabó todo el café ahora mismo"

"Ni siquiera un café, me siento mal, hombre". Después de eso, me di la vuelta y escuché al chico hablar de nuevo, pero ignoré lo que estaba diciendo.

"¡Ah! ¡Jin-Woo! ¡Estás herido de nuevo!" Cuando escuché su voz, sonreí cálidamente.