Las guerras del rey Aegon I
El largo reinado del rey Aegon I Targaryen, del 1 d. C. al 37 d. C., fue pacífico en términos generales, sobre todo en los últimos años. Pero antes de la Paz del Dragón, como más adelante denominaron los maestres de la Ciudadela a los dos últimos decenios de su reinado, tuvieron lugar las guerras del Dragón, la última de las cuales fue el conflicto más encarnizado y sangriento que había visto Poniente en toda su historia.
Pese a que se consideraba que las guerras de la Conquista finalizaron cuando el Septón Supremo coronó y ungió a Aegon en el Septo Estrellado de Antigua, no todo Poniente se había sometido a su gobierno.
En el Mordisco, los señores de las Tres Hermanas habían aprovechado el caos de la Conquista de Aegon para declarar su independencia y coronar a lady Marla de la casa Sunderland. Puesto que la flota de los Arryn había quedado prácticamente destruida durante la Conquista, el rey ordenó a Torrhen Stark de Invernalia, su Guardián del Norte, que sofocase la rebelión de los hombres de las Tres Hermanas, y un ejército norteño partió de Puerto Blanco en una flota de galeras braavosíes contratadas, a cuyo mando iba a ser Warrick Manderly.
A la vista de las velas y de la repentina aparición de la reina Visenya y Vhagar en el cielo, sobre Villahermana, los hombres de las Hermanas se desmoralizaron y depusieron a toda prisa a la reina Marla para coronar a su hermano menor. Steffon Sunderland renovó su voto de lealtad al Nido de Águilas, se prosternó ante Visenya y entregó a sus hijos como rehenes en garantía de su buen comportamiento: a uno lo acogieron los Manderly; al otro, la casa Arryn.
Su hermana, la reina depuesta, fue exiliada y encarcelada. Cinco años después le cortaron la lengua, y pasó el resto de su vida entre las Hermanas Silenciosas atendiendo los cadáveres de los nobles fallecidos.
En el otro extremo de Poniente, las Islas del Hierro se hallaban sumidas en el caos. La casa Hoare, que había gobernado a los hombres del hierro durante muchos siglos, se extinguió en una sola noche cuando Aegon descargó el fuego de Balerion sobre Harrenhal. Pese a que Harren el Negro y sus hijos perecieron entre las llamas, se declaró a Qhorin Volmark de Harlaw, cuya abuela era hermana menor del abuelo de Harren, legítimo heredero de «la línea negra», y se hizo con el trono.
No obstante, no todos los hombres del hierro aceptaron su coronación. En Viejo Wyk, bajo los huesos de Nagga, el dragón marino, los sacerdotes del Dios Ahogado colocaron una corona de madera de deriva en la cabeza de uno de los suyos, el sacerdote descalzo Lodos, que se proclamaba hijo del Dios Ahogado y de quien se rumoreaba que podía realizar milagros.
Otros aspirantes al trono se alzaron en Gran Wyk, Pyke y Monteorca, y durante más de un año, sus partidarios lucharon en tierra y mar. Se dice que las aguas que separaban las islas estaban tan saturadas de cadáveres que los krákens acudían a cientos atraídos por la sangre.
Aegon Targaryen puso fin a la contienda al descender sobre las islas en el año 2 d. C., montado sobre Balerion. Con él llegaron las flotas del Rejo, Altojardín y Lannisport, e incluso unos cuantos barcoluengos de la Isla del Oso enviados por Torrhen Stark. Los hombres del hierro, con las filas mermadas por un año de guerra fratricida, opusieron poca resistencia; de hecho, muchos de ellos recibieron de buen grado la llegada de los
dragones.El rey Aegon mató a Qhorin Volmark con Fuegoscuro, pero permitió que su hijo, todavía un niño, heredase las tierras y el castillo de su padre. En Viejo Wyk, el rey y sacerdote Lodos, supuesto hijo del Dios Ahogado, invocó a los krákens de las profundidades para que se alzasen y hundieran los barcos del invasor. Puesto que no sucedió tal cosa, Lodos se rellenó la ropa de piedras y entró caminando en el mar «en busca del consejo de mi padre». Miles de hombres lo siguieron.
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Fuego Y Sangre
De TodoSiglos antes de que tuvieran lugar los acontecimientos que se relatan en «Canción de hielo y fuego», la casa Targaryen, la única dinastía de señores dragón que sobrevivió a la Maldición de Valyria, se asentó en la isla de Rocadragón. ¿Qué pasó realm...