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Husk se aterra al ver a aquel chico cadáver, el cual se iba acercando cada vez más a el. No lo pensó ni dos segundos y se puso a correr, huyendo a aquel posible espectro.

El chico cadáver empezó a perseguirlo, sin antes recuperar su mano huesuda. Empezó a correr detrás de el, con esa mirada inexpresiva y vacía que daba demasiado miedo.

Husk corría como sus piernas se lo permitían, llegando así hasta el puente que conectaba con el pueblo.

Su respiración estaba demasiado agitada y su corazón latía como loco, empezó a jadear de cansancio a la vez que tenía una expresión de miedo en su rostro. Miro a varios lados y se alivio al no encontrarse con el cadáver, pero luego miro hacia atrás, viendolo con esa mirada que no expresaba ninguna emoción.

Se sobresalta y trata de alejarse, pero termina acorralado contra uno de los barandales de puente.

—Puedes besar al novio...— Susurra el chico cadáver para luego tomar el rostro del felino en sus manos y juntar sus fríos labios con los del contrario, formando así un beso frio y turbio. Dejando a Husk inconsciente.

(...)

—¿Es alguien nuevo?—
—Se ve... Diferente a nosotros...—
—Solo esta dormido, ¿estas bien?—

Husk abrió sus ojos levemente, teniendo la vista ligeramente borrosa, viendo rostros desconocidos.—¿Donde estoy?— Pregunto con una voz algo ronca y adormilada.

—¡Ya desperto!—Habló una chica rubia e igual de piel pálida, con ojos amarillos desteñidos.—¡Que envidia, el si respira!— Habló otro chico que tenía la apariencia de una serpiente.—¿Quienes son ustedes?...— Vuelve a preguntar el felino, confundido al ver a todas esas personas desconocidas.

Se incorporo en la mesa donde estaba acostado, viendo a todas esas personas con más claridad: todas esas personas estaban palidas, de hecho demasiado para ser humanos. Todos tenían heridas en su cuerpo, las cuales parecían en un proceso de putrefacción. Sus ojos no tenían brillo, solamente eran de colores pálidos y desteñidos o de negro puro como la noche.

—¡Pero aún no está tieso!— Dijo una chica de baja de estatura, pelirroja y con un solo ojo, tocando a Husk con un palo de escoba.

Dos personas más estaban sosteniendo unas copas que contenían bebidas alcohólicas, una parecía ser una pequeña angel, con su ropa desgastada y una de sus alas rota, también pálida y acompañada de heridas putrefactas.
La otra era una chica que al parecer había perdido un ojo, el cual era remplazado por una X. También su ropa estaba desgastada y sucia.

Ambas chicas chocaron sus copas.—¡Brindemos por los esposos!— Dijeron ambas en unísono para luego beber el contenido de la copa.

—¿Esposos?...— Pregunta Husk confundido, volteando la mirada para ver a su alrededor, y para su mala suerte, volviéndose a topar con el chico cadáver.—¡Si!— Responde aquel chico embosando una sonrisa en su pálida cara.—En el bosque, dijiste tus votos... ¡Y a la perfección!— El chico desconocido mostro su huesuda mano, mostrando que tenía puesto el anillo.

—¿Lo hice?...— Se dice Husk a si mismo, con shock.—¡Los dije!— Acto seguido, el empieza a golpearse la cabeza contra la mesa, en un intento de despertar de una posible pesadilla.—¡Despierta!, ¡Despierta!...—

—Oh, oye amigo, calmate, no mordemos.— Habló de repente un chica de piel azulada, pelinegra y de ojos negros.—¿Es normal que alguien actúe así después de venir a la tierra de los muertos?— Pregunta la misma chica.
—Si, es normal, ya paso otras veces.— Respondió la rubia.

—¿¡Tierra de los muertos!?— Pregunta Husk en shock, sin poder creer lo que sus oídos escuchaban.—Oye cariño, tranquilo, no debes por que temer.— Le dice el chico desconocido, ayudandolo a volverse a incorporar.

୧ 𝗖𝗢𝗥𝗣𝗦𝗘 𝗕𝗥𝗜𝗗𝗘 ୨ | 𝘏𝘶𝘴𝘬𝘦𝘳𝘥𝘶𝘴𝘵Donde viven las historias. Descúbrelo ahora