Capítulo 13

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Para la mala suerte del triángulo azul, apareció justo en la habitación de los gemelos Pines, asustando a la castaña.

—¡Woah!—cayó al suelo de espaldas—¡Aléjate dorito azul!

—¡P-Perdón, Señorita Pines!

El demonio se disculpó de inmediato, levantando a esta del suelo con sus poderes, poniéndola en su cama con delicadeza.

El otro gemelo entró rápidamente, azotando la puerta preocupado.

—¡¿Qué sucede Mabel?!—se percató de la presencia del triángulo—¡Ah! ¡Tío Ford! ¡Tío Stan! ¡Bill Cipher volvió!

—No, no, no es lo que parece, por favor tranquilícese.—trató de no entrar en pánico.

En unos cuantos segundos los dos adultos de canas estaban ahí.

—¡Tu! Maldito demonio de un ojo.—Stan se acercó con toda la intención de golpearlo, ante esto el azul se cubrió con sus manos.

—¡Espera, Stanley!—interrumpió al otro poniendo su brazo para detenerlo—Hay algo raro aquí, él no es Bill.

—¡Pero es igual!—respondió el castaño con miedo.

—Calma, Dipper.—se acercó al triángulo con lentitud—¿Will?

Los cuatro miraron sorprendidos a Stanford.

—¿M-Me conoces?

—Pues no en persona, solo por menciones de Bill.—se rasco la nuca con cierta incomodidad.

—Oh, supongo que su noviazgo era muy enserio.

—¡¿Qué?!

Los Pines exclamaron atónitos, mirando al seis dedos.

—Bien, esta no era la manera en la que quería contarles esto, pero supongo que ya no tengo de otra.—suspiró avergonzado.

—Ya decía yo que en los diarios había algunas cosas que percibía diferentes, ¡era el poder del amor!—bromeó la menor.

—De todas las cosas que han pasado, incluso el descubrir que mi tío era el autor de los diarios, creo que esta supera todo lo que he conocido desde que teníamos 13.—comentó aún sorprendido el castaño.

—Bien, ¿alguien más tiene algo que decir?—Ford miró a su gemelo, esperando un muy mal comentario.

—Hermano...—puso su mano en su hombro—El amor te puede destruir sin que te des cuenta hasta que acaba, estuve casado y fue terrible, supongo que salir con un demonio pudo ser emocionante pero dime que no fuiste tu el tóxico de la relación.

—Claro que no fuí yo el tóxico, Stanley. Aunque también debo admitir que no era fácil estar con él, así que fuí muy honesto, pero no lo tomó bien.

—¡Disculpen!—habló el triángulo—Yo sé que la noticia es impactante pero, vine aquí por algo muy importante y urgente.

—Oh, claro, cuéntanos Will.

—¿Enserio vamos a escuchar a un pariente de tu ex?—cuestionó Stan con molestia.

—Calla, Stanley.

—¡Perdone las molestias Señor Pines!—se disculpó una vez más—Mi presencia aquí se debe a que mi hermano secuestró a mi, bueno ex dueño, mi Stanford Gleeful, están por hacer un trato y no creo que sea algo bueno para ninguno de nosotros.

—¿Gleeful? ¿Cómo Gideon Gleeful?—la adolescente preguntó con desagrado.

—Si, nunca me crucé en esa línea alterna, pero había escuchado mucho de ella, especialmente cuando Bill me amenazaba con dejarme por otro Sixer para darme celos.—aclaró el mayor—Básicamente es una realidad donde nosotros somos los malos.

—Si, es a dónde pertenezco yo, así como ustedes tienen a Bill, en Reverse Falls me tienen a mi.

—¿Entonces qué podemos hacer?—el castaño estaba intrigado por la aventura nueva.

—Quizá la presencia de el señor Stanford Pines pueda hacer algo diferente, pero no dudo que también pueda empeorar las cosas, así que esperaba saber con qué otras cosas podemos atacarlo, en caso de ser necesario.—el demonio habló con mayor seguridad.

—Dipper, trae los diarios, esto requiere un chapuzón a mi pasado y mis memorias con él.

—¡De inmediato, tío Ford!

El gemelo corrió por los libros con emoción. Will se sentó en la orilla de una de las camas, preocupado por la situación, a lo que Ford le hizo compañía.

—Hay, todo va a estar bien, vamos a estabilizar las cosas. Sé lo peligroso que sería un cruce de nuestras dimensiones, créeme que yo busco proteger las realidades.

El azul se transformó en su forma humana para abrazarlo, soltando algunas lágrimas.

—Gracias, Señor Pines.

—¡Wow!—le correspondió al abrazo dudoso—Tranquilo, tu Stanford estará bien.

Aunque tuvo el impulso de contarle su historia con su Gleeful, prefirió guardar silencio y disfrutar el confort del abrazo.

Le hacía falta después de tantos años.

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¡Hola!

Solo para aclarar que los gemelos Dipper y Mabel son adolescentes, 17-19 años aproximadamente.

Espero les esté gustando, que nervios volver a escribir seguido ;w; trataré de ser constante, pero sean pacientes con este wey disociado xd

See ya! :]

–Mely.

Nice To Meet You [FordWill]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora