Why him? • Jaywon

[04]

Jungwon había vuelto a su aparta después del primer día en la universidad. Había sido completamente horrible, había estado solo todo el día, tal como cuando era pequeño, nadie le había hablado más que para pedirle la hora y lo peor había sido haberse sentado entre dos parejas, haciéndole estar completamente incómodo todo el día.

Cuando volvió a su apartamento, agotado a las 05:48 de la tarde, había decidido ir a acostarse a su habitación, pero apenas entró a la viviendo, la puerta chocó con algo que le impidió abrirla completamente. Frunció el ceño y comenzó a empujarla puerta hasta que la abrió, viendo como en frente suyo estaba Jay tirado en el suelo.

Su corazón se paró un segundo, pensando lo peor, por lo que, con algo de miedo, se acercó a este, aliviándose al verle respirar.

Yang soltó un suspiro y sacó su teléfono, decidido a llamar a una ambulancia para llevar al contrario al hospital. Esta no tardó mucho en llegar.

—Uhm, ¿Puedo acompañarlo?

Preguntó el azabache a los paramédicos, quienes respondieron afirmativamente. El chico inmediatamente los siguió escaleras abajo hasta la primera planta, donde subió a la ambulancia junto con Park.

Ni siquiera tenía idea porqué lo estaba ayudando o porqué estaba preocupado, Jay había sido una horrible persona con él, sin embargo, Jungwon no era así, Jungwon no era una mala persona.

No tardaron más de media hora en llegar al hospital, donde llevaron a Park al área de revisión.

Le hicieron rellenar unos datos acerca del azabache y solo pudo completar algunas cosas, como su nombre, teléfono y dirección, después de todo, no conocía mucho a Jay, no ahora por lo menos.

Así pasaron unos cuarenta minutos hasta que un chico de cabellos castaños llegó preguntando por su roomie, a lo que Jungwon se le acercó.

—Hola, mhm, me llamo Jungwon, ¿Buscas a Jay?

El chico asintió a lo que Yang le pidió que lo siguiera hasta la camilla del mayor.

—Maldito mocoso, te dije que tenías que descansar.

Aquel comentario llamó la atención del azabache, quien le observó con curiosidad.

—¿A qué te refieres?

—A que este idiota está evitando dormir para poder hacer horas extras cuando claramente le dije que no debía hacerlo.

¿Horas extras? el menor no entendía porqué su roomie trabajaba tanto, quizás había algo que quería comprar, no lo sabía.

—A todo esto, me llamo Heeseung, perdona por no presentarme antes.

El más bajo asintió y notaron movimientos por parte de Park, a lo que inmediatamente ambos se acercaron a este para comprobar su estado.

Al ver como abría los ojos, el mayor de los tres se acercó a Jay dándole un suave empujón.

—Maldito idiota, ¿Cómo crees que me siento cuando me llaman mientras estoy trabajando y me dicen que volviste a colapsar.

Jungwon no estaba entendiendo mucho aquella conversación por lo que pensaba en irse.

—Eh, ¿Jungwon verdad? Gracias por traer a mi Jay.

El chico antes mencionado, sonrió al escuchar a su mayor y tomó la mano de este, atrayéndole a su persona y Heeseung se acercó a unir sus labios con los de su pareja.

Jungwon, sintiéndose incómodo, dijo que se iría, a lo que fue inevitable que este comenzara a sobre pensar.

A Yang siempre lo hostigaron por su gusto por los hombres, pero ahora, el azabache estaba con el castaño, realmente no entendía a donde se había ido ese odioso Jay de hace seis años, aunque era mejor así, si todo seguía tal como estaba, quizás su año viviendo con Park no sería un infierno.

Si tenía que ser honesto, se había sentido muy incómodo al ver aquella escena de pareja, aquello simplemente no le gustaba, no entendía la necesidad de dar muestras de afecto en público. 

Jungwon al volver al apartamento que compartía con Jay, se fue directo a recostar en su cama, pensando en lo que había ocurrido esos últimos días, nunca pensó tener que volver a ver al azabache después de que este salió de la secundaria, pero ahí estaba, viviendo con él y para peor, el mayor hacía como que nada había pasado, que nada había ocurrido.

Para Jungwon, la época de secundaría fue horrible, desde sus doce hasta sus trece años, si bien era acosado por el grupo de Park, gracias a eso, fue objeto de malas bromas, burlas, comentarios maliciosos y mentiras acerca de su persona. 

No podía entender como aquella persona que le hizo tanto daño podía fingir demencia ante todo lo sucedido, no entendía el propósito, quizás se arrepentía y no quería disculparse, quizás ni siquiera recordaba al chico que traumatizó, capaz simplemente no quería disculparse y haría como que nada de su pasado existió.

En lo que sobre pensaba, ya había pasado alrededor de una hora, a lo que escuchó la puerta abrirse, supo de inmediato que era el chico del cual estaba pensando tantas cosas, iba a ir a preguntarle si estaba bien, sin embargo, escuchó otra voz en compañía de este, a lo que no quiso salir de su habitación.

Se imaginaba quien podría estar acompañándolo, aquel chico que al parecer era su pareja y que fue a verle al hospital.

—Amor, sabes que debes descansar, debes renunciar a uno de tus trabajos, con uno es más que suficiente.

Aquella conversación podía escucharla, pues las paredes no eran muy aislantes del ruido.

—Ya hemos hablado de esto, tengo que. Me queda poco tiempo.

Aquello inmediatamente llamó la atención de Yang. ¿Poco tiempo? ¿A qué se refería? ¿Poco tiempo para qué?

—Lo sé pero... yo también trabajo, puedo ayudarte-

—No.

Luego de que aquella conversación terminara abruptamente, escuchó el ruido de la puerta abriéndose, por lo que supo que el invitado se había ido. 

El azabache no había tenido intenciones de espiar aquella conversación, sin embargo fue inevitable que aquello ocurriera, esto debido a la poca privacidad que tenía aquel departamento.

El chico suspiró y decidió salir de su habitación para así ir a ver a su roomie, pues igualmente quería asegurarse de que este estuviera bien a pesar de todo.

Al verle sentado en el sofá, caminó lentamente hacia este. Sin embargo, apenas el más alto le vio, inmediatamente se levantó, como si estuviera asustado, como si temiese de Yang.

—¿Cómo entraste aquí? ¿Qué haces en mi apartamento? ¿Quién eres?