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-¿Y tú, mami? ¿Alguna vez has estado con una chica?

Yoko se atragantó con el agua.

Ella tosió un par de veces y miró hacia otro lado, ignorando por completo las miradas que recibía, especialmente las de la mujer sentada a su lado.

¿Les pareció divertido? ¿O el alcohol hizo que todo fuera tan irrelevante que ya no les importó ocultar su curiosidad?

Bueno, no era un misterio total por qué la trataban con cautela cuando se trataba de su... inexistente vida amorosa. Porque no existía.

La joven actriz sintió unas suaves palmaditas en la espalda que la sobresaltaron aún más y se apartó un poco. Sólo un poquito.

-No voy a responder a eso -se rió Yoko para sí misma, también un poco mareada por los tragos de vodka que había tomado.

Cuando ella extendió la mano para alcanzar el pequeño vaso que estaba en la mesa de café entre ellas, después de apartar las botellas vacías de vodka, la mujer a su lado fue más rápida y rápidamente bebió el trago por ella.

-¡Ay! ¡Vamos, Faye, eso no es justo!

La ex Miss Grand Tailandia le devolvió la sonrisa a Ice, antes de dejar el vaso sobre la mesa de madera. El ruido era fuerte y sus risas de borrachas llenaron la habitación con una familiaridad a la que las cuatro actrices se habían acostumbrado, y en la que Yoko se sintió particularmente cómoda. Incluso con las preguntas autoritarias.

-Me llamaste para que bebiera. Voy a beber -dijo Faye Malisorn con indiferencia.

-Eso... Y para divertirnos un poco más -intervino Marissa. Tenía la cabeza apoyada en el hombro de Ice y observaba al dúo que tenía delante sin una pizca de inocencia-. Sabes, la pequeña Yoko de ahí parecía demasiado confiada en las escenas de amor de ustedes. ¡Querías preguntarle también, Faye!

-¿En serio? -Yoko se giró de repente para mirar a la actriz en cuestión. Esta vez, Faye era la que evitaba su mirada.

("Dios, no tienes esperanza", murmuró Ice.)

-Sí, claro. Me dijiste que Blank era tu primera vez actuando en un drama GL. -Faye se rascó la nuca distraídamente. Siempre parecía intentar actuar como si no le molestara, riéndose o cambiando de tema, pero una cosa que Yoko había notado, al final del día, era que la mujer mayor nunca la apartaba.

-Fue... -susurró la actriz más joven. Ah... Supongo que está bien. -¿Qué quieres saber exactamente? -dijo con más seguridad.

Marissa inmediatamente se enderezó y se inclinó sobre la mesa. -¿Eres virgen?

-¿Por qué estás tan interesada en mi vida sexual? -Yoko se rió de su absurda curiosidad. Todas estaban sentadas con las piernas cruzadas sobre la mullida alfombra de la sala de estar, así que agarró una almohada cercana y la abrazó en su regazo.

Al ver que Marissa no lo dejaba pasar, la morena en cuestión finalmente respondió: -No. ¿Contenta?

-¿Alguna vez has estado con una chica?

Y ella está de vuelta.

-Yo-

-De ninguna manera -intervino Faye.

Yoko le devolvió la mirada de suficiencia con una mirada insultada. -¿Disculpa?

-No, no lo has hecho. -La actriz mayor la miró fijamente, sin apartar la mirada más.

-¿Saben sobre eso? -Yoko señaló a las chicas que estaban frente a ella, que ahora estaban muy calladas, y luego dejó caer la mano sobre la mesa-. ¿Cómo puedes estar tan segura? ¿Hm?

dim little room | fayeyokoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora