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La omega levanta su delicado rostro al ver al alfa en la entrada. —Alteza le presento a mi hermano, Taesan.
Taesan era un joven de tan solo veinte años. A la edad de quince años fue obligado a pertenecer a la guardia real, después que su padre, un viejo herrero falleciera.
Taesan lució sorprendido y con el temor en su mirada.— Mi rey.— se inclinó y sostuvo la mano de Hyunjin para después besarla. —Estoy sorprendido de tenerlo aquí.
—Taesan, tu hermana ha sido una excelente anfitriona deberías estar orgulloso por eso, me temo que mi gente nos espera y no puedo retrasar mi salida. — Hyunjin habló, y en su voz había serenidad, como si el hombre que tenía frente a sus ojos no fuera perteneciente del grupo de liberadores que planeaban un golpe de estado. —Omega, ha sido muy amable con nosotros y no será olvidado.
El rey se puso de pie y con amabilidad ofreció su mano para que su omega la tomara lo cual sucedió inmediatamente, pasando a un lado de Taesan este solo agachó la cabeza con respeto.
—Era él.— Es lo primero que dice Seungmin cuando comienzan a caminar sobre el sendero, el omega se mantenía pegado a su alfa y caminaba lentamente.
—Lo sé y él lo sabe. Lo vi en su mirada. —Hyunjin responde, su brazo acariciando la cintura de Seungmin, —Lo citaré en el palacio, lo necesitamos de nuestro lado.
Seungmin se detiene por un segundo y mira a su alfa. —¿Lo hará? Él puede simplemente ir a decirles y traicionarte.
Mirando hacia los ojos de su omega, suelta un suspiro. —Puede hacerlo, y lo tendré que matar. Es un alfa que no dejará a su hermana, una madre soltera, sola.
—¿Cómo lo sabes? —Seungmin vuelve a decir cuando comienzan a caminar de nuevo. A lo lejos, puede observar a la guardia real esperándolos. Ahí de pie estaba Changbin y Jeongin.
—No tiene marca, se ve enferma y su olor es muy tenue. —Hyunjin responde cuando se encuentran a pocos pies de distancia de los alfas.
—Hyunjin. —Jeongin dice y se acerca hacia los dos, comienza a inspeccionar al mayor obteniendo solamente un gruñido cuando se acerca demasiado a Seungmin. —Oh.
—Estamos bien, Jeongin, puedes alejarte de mi omega. —Hyunjin dice, sus dientes luciendo afilados cuando Jeongin no se aleja de Seungmin, y finalmente Changbin se acerca alejando a Jeongin.
—Ven, déjalos tomar un poco de aire. —Changbin toma del brazo a Jeongin y lo lleva unos pasos hacia atrás. —Felicidades. —Finalmente dice, cuando Hyunjin ha dejado de gruñir, aunque mantiene a su omega cerca de él.
Después de que el rey y su omega llegaron al campamento, fueron recibidos por una mesa de comida fresca. Seungmin fue llevado a descansar.
Hyunjin no podía dejar de mirar la carpa donde debía estar su omega. —Es Sana. Ella de alguna manera es la líder.
