⸻ Categoría madura puesta por: Nsfw (+18), descripciones gráficas de muertes, de trastornos, y heridas, material sobre suicidio, palabras denigrantes, afrodisiaco, leves referencias a las drogas, y autodestructivo. (Esto se estará actualizando).
⸻...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
"Aún estás vivo en mi cabeza"
Neptuno estaba pasando el rato con su peluche Guillermo, teniendo una sonrisa en su rostro cada vez que se detenía para apreciar su peluche. Él estaba esperando a su amigo celeste, Uranu, quien debería de volver, ya que, si no mal recuerda, se tuvo que ir a hacer algo afuera, tal vez a comprar más comida, debido a que quedaba poca o ¿de eso se encargaba aquel rubio hace ya algunos meses atrás?, no sabía, no recordaba bien.
Pasaron los segundos, minutos, tal vez horas y él no llegaba. Un sentimiento amargo y de preocupación se instalaron, ya era de noche, tal vez, muy noche. No sabía que hora son, no le importaba, mucho menos el día en el que se encontraba. Lo único que le importaba era su amigo Uruno.
Se levantó y fue a buscarlo por la casa, estaba preocupado, totalmente asustado de que se fuera para siempre, otra vez. Afortunadamente, lo encontró escribiendo en su diario en su habitación. Aquel miedo desapareció, pero un sentimiento de inquietud apareció a cambio, un sentimiento algo familiar, debido a que siempre cuando estaba cerca de él sentía aquella sensación, eso había empezado hace algunos meses atrás, justamente cuando aquel rubio empezó a encargarse de traer comida. No dudo en sentarse a su lado y apoyar su cabeza en su hombro, su piel se veía más pálida de lo normal, ¿o era así siempre?, y alrededor se sentía muy frío.
⸻ ¿Qué dibujas? ⸻ preguntó, pero no tuvo respuesta. Bufo y mostró una mueca divertida, luego vio lo que hacía en su diario. Eran varias notas, pero lo que le llamaba más la atención era un dibujo, él estando ahorcado. Sintió como el aire se le iba.
⸻ ¿Por qué dibujaste eso Uta? ⸻ preguntó alarmado, estando un poco aturdido. Aquel miedo de perderlo volvió apoderarse de él.
⸻ Lo siento ⸻ contestó el celeste, a diferencia de la primera vez, esta vez contesto. ⸻ Déjame ir Neptuno ⸻ dijo a continuación con una voz que se escuchaba cansada y casi inentendible, como si algo le estuviese apretando su cuello y eso ocasionaba su impedimento para hablar correctamente.
⸻ ¡No!, jamás te soltaré. ⸻ dijo con firmeza y extrañado, casi alarmado por tal petición. Jamás soltaría a su único amigo, a la persona que más quería en el mundo. Tal petición lo destrozó, pero no lo hizo mostrar a su totalidad.
⸻ Neptuno, estoy cansado. ⸻ volvió hablar, esta vez al borde del llanto. Se veía muy cansado y se podía apreciar perfectamente en su voz y cara. ⸻ Solo déjame ir, no es saludable para ti ⸻ dijo con preocupación, mientras miraba con tristeza a su amigo. ⸻ Debes, no, TIENES que superarme. ⸻ finalizó.
El azulado no entendía lo que decía aquel celeste, que solo suplicaba para que lo soltara. Él no podía hacer eso, y jamás podría hacerlo, tal cosa lo rompía. Simplemente, no era nada sin el celeste.
