0.4 | you are not my problem

102 9 0
                                    

𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟎𝟒
❝ Tú no eres mi
problema ❞

🌹⋆。‧˚ʚ────────ɞ˚‧。⋆.🌹

📍 Instituto de Alto Rendimiento Deportivo de Barcelona (IARDB), BARCELONAOctubre 24, 2022 | 08:35 a

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

📍 Instituto de Alto Rendimiento Deportivo de Barcelona (IARDB), BARCELONA
Octubre 24, 2022 | 08:35 a.m

El sonido de las risas resonaba en el pasillo mientras Fiona corría, maldiciendo en silencio su mala suerte. Había despertado tarde, su alarma no sonó, el transporte se había retrasado y ahora, con las prisas, sentía cómo el sudor empezaba a perlar su frente. Su cabello pelirrojo, que normalmente llevaba perfectamente atado en una coleta alta, estaba revuelto por la velocidad con la que había tenido que salir de casa, con mechones desordenados cayendo sobre su rostro. Para colmo, el aula de matemáticas estaba en la otra punta del edificio, como si el destino se hubiera confabulado en su contra.

Giró en la última esquina del pasillo, con la esperanza de que el profesor aún no hubiera empezado la clase, pero lo primero que vio fue a un grupo de chicos plantados justo frente a la puerta del aula. Héctor, Marc y varios otros futbolistas estaban allí, charlando y riendo como si no tuvieran ninguna prisa por entrar. El corazón de Fiona dio un vuelco; no era suficiente con llegar tarde, ahora tenía que encontrárselos justo cuando todo lo que quería era pasar desapercibida.

—¿Tenían que llegar ahora? ¿Justo hoy?—pensó, maldiciendo en su interior. Sabía que se incorporarían rápido, pero tampoco estaba preparada para un encuentro incómodo.

Con un esfuerzo por mantener la calma, Fiona enderezó la espalda y ajustó la correa de su mochila. No podía simplemente detenerse o retroceder, así que optó por avanzar con paso firme, fingiendo una seguridad que no sentía. A medida que se acercaba, las risas de los chicos parecían bajar de volumen, y notó cómo las miradas se giraban hacia ella. Héctor, que estaba de espaldas al principio, fue el primero en volverse, con una sonrisa que a ella le resultaba insoportable, una mueca que sólo prometía burlas.

—Pero bueno, ¿a quién tenemos aquí?—comentó Héctor en un tono que destilaba burla, lo suficientemente alto como para que todo el grupo lo escuchara.

Las risas de sus compañeros le siguieron, como si la simple idea de que Fiona llegara tarde fuera motivo de diversión. Fiona se obligó a no reaccionar. Miró a Héctor de reojo, dándole una mirada que intentaba ser indiferente, pero el calor de la molestia comenzaba a subirle al rostro, haciéndola sentir expuesta y vulnerable.

—¿Te quedaste practicando esos giros hasta tarde, pelirroja?—añadió Héctor, con una sonrisa torcida que se ensanchaba a medida que notaba la incomodidad de Fiona—. Deberías peinarte de vez en cuando.

Fiona cerró los puños dentro de los bolsillos de su chaqueta, sintiendo cómo la rabia comenzaba a agitarse en su pecho. Quería responder, decirle algo que lo callara para siempre, pero sabía que era exactamente lo que él quería: una reacción. No iba a dársela.

𝐏𝐈𝐋𝐋𝐎𝐖𝐓𝐀𝐋𝐊; hector fortDonde viven las historias. Descúbrelo ahora