9. Balanceame.

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AYLA PAX MANSIÓN MORRIGAN HILLS D

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AYLA PAX
MANSIÓN MORRIGAN
HILLS D.C

Hoy habría un baile.

Al parecer, Luthor amaneció con ganas de derrochar su asqueroso dinero invitando a los capos más grandes de Káliria, a los jefes y mandatarios más poderosos a su propia casa.

Así que ahí estaba yo, en la habitación de Mackenzie.

Mientras unas chicas maquillaban a Mack y yo observaba, con mi traje táctico, el repertorio de joyas que ella tenía.

Ella vivía literalmente como una princesa. Siendo la única mujer de su familia, la más pequeña y la favorita de su padre.

Ella obtenía todos los lujos y comodidades que cualquier mujer desearía tener. Pues a su corta edad ya ha logrado estudiar para ser forense, es soldado de mi tropa, es millonaria y puede tener lo que quiera cuando quiera y como quiera.

—Ayla —me llama y yo la miro seria— Perdón… Teniente —se corrige.

Yo sonrío:

—Dime.

—Deberías arreglarte para la ocasión —me dice moviendo sus hombros de forma coqueta— No es que te luzca mal el traje, para nada, es solo que deberías ponerte algo más llamativo.

Yo realmente quisiera sacarme estás botas y ponerme unos tacones, tirar el chaleco y las armas por un vestido y joyas… Pero no podía.

—Se me ordenó cuidar de ti —digo lo que el hijo de su madre de Zyran me ordenó.

Gracias a su generosa orden no puedo desobedecer y volverme loca hoy, fue un odioso y arrogante al pedirme cuidar de Mack como si yo fuera una escolta más.

Ella se voltea dramáticamente a mirarme con la boca abierta y él ceño fruncido:

—¡Qué imbécil! —bramó— ¡Lo voy envenenar a ver si muere de una vez y deja de joder!.

Eso es, hazlo, Mack.

Hazlo que lo único que perderás es tiempo, porque a ese pendejo el veneno no le hace, si tiene de más en la sangre.

—Pues yo te ordeno que no lo hagas —dice aplicándose una loción aceitosa en el pecho y hombros.

Olía a canela.

Ella se levanta y ordena a las chicas que salgan del lugar mientras busca en su closet algo que no distingo ya que es una habitación aparte, mucho más amplia y larga con luces y espejos.

Cuando sale la detallo y está usando un vestido rojo vinotinto ceñido a su cuerpo, largo y con una abertura en la pierna, se veía elegante… Al voltearse, no sé por qué sentía que ahora se parecía mucho más a Zyran.

Era curioso, pero cierto.

Tienen literalmente la misma cara solo que ella tiene el cabello largo y rasgos femeninos, me sorprendió tanto verla que incluso ignoré que en sus manos traía tres opciones de vestidos.

Ayla Pax: B12. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora