ASUNTOS APASIONADOS - MILKLOVE (GIP)

Capitulo 2

Milk se detuvo en su club durante unos minutos para saludar al nuevo DJ invitado, un chico que todos los asistentes parecían conocer. Vio a Ciize sentada en su cabina VIP habitual, había pasado un tiempo desde que la había visto, pero solo asintió en su dirección, Ciize hizo pucheros y apartó la cabeza de ella.

Probablemente era lo mejor, dadas las circunstancias con su nuevo trato. Un trato al que estaba más ansiosa por volver de lo que le gustaria admitir.
Salió del club y condujo su Aston Martin hasta su loft en el centro, anticipando lo que traería la noche.

Nada la excitaba más que la sensación de tener el control total.

-Que tenga una buena noche, Señora Vosbein- dijo el viejo portero, mientras mantenía abiertas las puertas de vidrio para ella.

-Usted también- respondió Milk, mientras entraba al edificio. Presionó su código personal en el teclado del ascensor y se detuvo en el piso superior

Cuando abrió la puerta, escaneó la sala principal, pero no la vio. ¿Se había echado atrás en su trato? Mierda. Suspiró y dejó las llaves en el mostrador. Su loft se mantenía increíblemente limpio, tenía una empleada doméstica que venía tres veces por semana, pero en realidad le pagaba por nada. Nunca usaba ese condominio, pero por ahora prefería dejarla quedarse aquí, ya que esta era su escapada del momento, por lo general nunca tenía tiempo para realmente "escaparse".

Trató de ignorar la decepción que sentía, racionalizando que esa chica no era nadie y que no debería preocuparse por eso. Se quitó la chaqueta y comenzó a desabrochar su camisa de vestir azul oscuro. Caminó hacia la habitación de atrás y, tan pronto como cruzó la puerta de su dormitorio, sintió que algo duro le golpeaba el costado de la cabeza.

-¡Mierda!- El golpe no fue lo suficientemente fuerte como para derribarla, pero si lo suficiente para causarle dolor. Pensó que alguien estaba tratando de robarla. Ese maldito tendría más de lo que esperaba por siquiera intentarlo.

Se giró y agarró al culpable, arrojándolo al suelo con fuerza.

-¡Ay!- exclamó el ladrón con una voz de niña. Se puso de pie, levantó a la pequeña figura y encendió la luz.

-¡Maldita sea, Pattranite! ¿Qué diablos estabas haciendo?- preguntó, agarrando sus manos sujetándola contra la pared. No podía creer que ella tuviera la audacia de atacarla de esa manera

Love solo la miró, con el cuello doliendo de mirar hacia arriba. Había planeado noquearla, pero después de eso no estaba muy segura que más hacer. Se había sentado en ese lugar durante horas, decidida a no dejar que esta mujer se apoderara de ella.

Ella era una buena persona y no iba a dejar que le arrebatara eso.

Milk la tomó en sus brazos, mirando fijamente su hermoso rostro. Ambas respiraban con dificultad debido a la ira. Sintió el latido en su cabeza por el objeto con el que la golpeó, lo que la molestó aún más, pero esa ira que la recorría, también le hizo querer follarla sin sentido hasta que perdiera el conocimiento.

Soltó una de sus manos y agarró su garganta. Apretó ligeramente la suave carne, preguntándose cuándo comenzaría a ver miedo en sus ojos y empezaría a suplicar que la suelte.

El rostro de la chica no demostraba nada, pero Milk pensó que le tenía miedo. La mayoría de la gente le tenía miedo.

Un escalofrío recorrió de inmediato el cuerpo de Love y estalló en la parte superior de sus piernas.
Cuando la idiota más apretaba y le cortaba la respiración, más mojada se ponía. ¡¿Qué diablos le pasaba?! Nunca había experimentado violencia como esta. No sabía por qué la estaba afectando de esta manera. Se suponía que debía estar llorando y gritando, no excitándose.