Spell

03

El calor quemaba mi piel.

Estaba completamente desnuda, veía las llamas a mi alrededor y podía escuchar miles de risas.

Desperté

El sudor hacia que mi pijama se pegara a mi cuerpo, mi respiración era acelerada.
Salte de la cama y corrí a abrir la ventana de mi habitación.

La luna llena iluminada la calle y solo se escuchaba el murmullo de la noche, un escalofrío recorrió mi cuerpo cuando mis ojos se cruzan con los de Shawn.

Mi vecino esta sentado en las escaleras del porche de su casa, su sonrisa se ancha como la del gato de Alicia en el país de las maravillas.

Su mano se mueve en forma de saludo, pero un extraño temor crece dentro de mi cuerpo cuando mi mirada cae en la sobre que está justo detrás de él.

Cierro la ventana de golpe y me agacho con las manos en mi pecho.

Mi cerebro intenta formular una oración, pero no puedo lograr recordar ninguna.

La puerta de mi habitación es abierta de pronto y un grito ahogado sale de mi garganta.

- Dios, Snow. - mi padre me reprende y siento el aire entrar a mis pulmones cuando el encienda la luz. - ¿Qué haces despierta, señorita?

- No podía dormir. - balbucea levantándome del suelo. - tuve una horrible pesadilla.

Mi padre me mira con los ojos entre cerrados y niega.

-Mañama hablaré con el Padre Kevin de esto. - cruza sus brazos

¿Qué tiene que ver el padre con mis pesadilla?

- Sabes que las pesadillas son obra del demonio. - el dice. - Nuestro amado dios nunca haria algo tan horrible.

Asiento no muy convencida, si Dios fuera tan perfecto no pasarían tantas tragedias.

¿Dudas del todo poderoso?