Volví por ella [Terminada]

Capítulo 6

~17 años~

-¿Alex vienes a cenar? -pregunta Jane entrando por la puerta de la habitación.

Alex quita la mirada de su libro y mira a su madre, que esta con un niño de cinco años que la veía con curiosidad. Su hermano Anthony.

-Si -contesta-. Me quedan tres páginas y voy.

-De acuerdo -acepta Jane poco convencida, va a irse pero se detiene y la mira-. ¿Estas bien?

-Si.

Jane suspira. Su hija no es que estuviera mal fisicamente ni nada parecido pero estaba extraña. Habían pasado cuatro años desde la ultima vez que visitó el País del Nunca Jamás y aunque no le había contado nada, se la notaba afectada.

-De acuerdo.

Y dicho eso Jane se aleja agarrando la mano de Anthony porque el pequeño quería quedarse con su hermana. Alex mira como se van su madre y hermano y sigue con sus estudios.

Se muerde el labio y mira su terraza por instinto, aunque le hubiera dicho a Peter Pan que no volvería siempre guardó una pequeña esperanza de que por la terraza mostrase a un joven de pelo rubio.

-¡Alex! -grita su padre desde abajo-. ¡Tienes visita!

La mencionada frunce el ceño y mira el reloj de su pared, eran casi las nueve de la noche. ¿Quién venia a esas horas?

-¡Ya voy!

Salió de su habitación y bajó las escaleras lo más rápido posible, se sentía intrigada, cuando llegó abajo vio a toda su familia en el recibidor y oía a hermano reír feliz.

-¿Quién es? -pregunta Alex extrañada.

Su familia se alejó un poco destapando al chico que estaba escondido, cuando lo vio no pudo evitar taparse la boca para no gritar. ¿Qué hacía ahí? ¿Después de tanto tiempo? ¿Sobre todo que hacía ahí tan mayor? Tampoco estaba tan mayor pero era de Peter Pan quien estábamos hablando, él se suponía que no crecía... Al menos hasta hoy.

Peter Pan estaba delante suya. Un joven de unos dieciocho años, con su pelo rubio algo mas oscuro, mas abundante y ligeramente revuelto, sus ojos verdes no habían perdido su brillo especial, alto, vestido muy elegante y muy atractivo.

Ella por su parte también había cambiado; su figura era delgada, su pelo se lo había dejado crecer de nuevo,  se había vuelto una chica muy hermosa y sus ojos si que habían perdido el brillo de antes.

-¿Qué es esto?

No se creía que de verdad Peter Pan estuviera delante de ella, se parecía mucho a él, claro pero... No se lo podía creer. Tal vez su imaginación le estaba pasando una mala pasada.

-¿Que es eso de que me tenga que cuidar Tigrilla? -preguntó él molesto.

De verdad que Peter estaba ahí, lo que acababa de decir lo confirmaba pero, ¿qué hacía ahí? ¿Que había hecho después de tanto tiempo? ¿Cómo es que estaba tan crecido? ¿Eso significaba que había estado en Londres y no le había dicho nada? ¿Donde estaba Campanilla? ¿Y los niños perdidos? ¡Tenía muchas preguntas!

Pero en vez de optar por preguntarle prefirió dirigirse a su madre, que veía a Peter.

-¿Mamá que significa esto?

-No lo sé, te lo prometo -dice Jane incrédula mirando al joven.

-¿Eres Peter Pan? -pregunta Anthony acercándose al chico y tirando un poco de su pantalón.

El chico joven se agacha para quedar a la altura del niño y sonríe ampliamente.

-El único e inmejorable -contesta.