Noveno Capítulo: Compromiso

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5 años antes...

Los nervios atacaban a Jisoo. Desde que Lisa había anunciado que iba a casarse con Jennie, las cosas cambiaron de rumbo. Ambas eran una pareja que llamaba mucho la atención, que era aclamada por las personas del alrededor, y Jisoo creía firmemente en qué serían uno de esos matrimonios especiales.

Solo que... Esto le dejaba mal parada, pues en los últimos meses, antes de la boda de sus amigas, Rosé había manifestado muchas veces lo feliz que estaba por ellas, por comenzar una vida juntas, y lo que llevaría después a ser algo más que una simple pareja común. Muchos de esos mensajes que Rosé dejaba para ella, pero Jisoo nunca entendía.

No porque no quisiera entenderlas, sino porque no sabe a qué se refiere con lo que dice. No puede descifrar lo que Rosé trata de explicar algunas (todas) las veces.

Así que ahora, está nerviosa, porque quiere hacerlo; Quiere pedir su mano, quiere ser su esposa, su alfa se pone contento de solo pensarlo, porque puede verla sentada en el pórtico de una nueva casa, con una cobija en las piernas mientras lee cualquier libro que haya en el librero.

Le encanta imaginarse que Rosé es así en su imaginación. Y por eso, ha decidido que es el momento, por lo menos de comprometerse. Sin embargo, no conoce a los padres de Rosé en persona. Ella sabe que ellos no viven en Corea, y que si quiere más que una bendición, debe ir hasta donde estén por su hija.

Sin embargo, no sabe cómo hacerlo, ha visto un millón de propuestas, pero ¿cómo crearía la suya?, Rosé muestra verdadero interés en las fotos y los viajes, sería posible que era una opción, ¿Podría llevarla a un lugar exótico y pedirle matrimonio?

Podría, pero primero tenía que arriesgarse a conocer a los padres de su amada novia, de su omega.

Así que una vez más, vió a Rosé acurrucada junto a un peluche, con los brazos enrrollados en el cuerpo del animal de felpa, suspirando tiernamente para mantenerlo cerca, dormida en el sofá, descansando después de un viernes lleno de regaños y problemas en el restaurante.

Dijo que había tenido que hacer un plato para críticos, su primera prueba para ver si el Tío Lee la aprobaba para seguir siendo cocinera, o pasaba de ser ayudante a ser algo más. Jisoo no entendía los roles de cocina, pero quería apoyar a su omega en los pasos que diera.

Así se tuviera que partir en mil pedazos para convencer al mundo de que daría todo por ella.

Su plan era sencillo, ir a casa de los padres de Chaeyoung, ir a buscar el lugar más extraño de Australia, tener un boleto para llevarla de ida y de vuelta, preparar una extraña cena y lograr tener un discurso en el que fuera suficiente todo para demostrar su amor.

Tenía miedo, claro que sí. Quizá podría decir que no, irse y hacer una vida con alguien más. En el peor de los casos, irse y ser feliz lejos de ella, cualquiera de las dos opciones, le dejaba como una idiota que no supo cómo hacer para tener una buena propuesta de matrimonio.

Así que decida a organizarlo, comenzó.

Un viaje para conseguir la mano de su 'prometida' pronto.

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Rosé tenía como de costumbre muchas ganas de ir a casa a dormir, esperaba que Jisoo llegara y verla haciendo cosas, una vez que su horario cambió, podrían tener más tiempo entre las dos para hacer más cosas y divertirse y no ser de esas horribles parejas que odian estar en casa.

Así que por el camino, revisó sus cosas en el bolso deportivo, comida en tuppers porque Jisoo nunca come y se espera a que ella llegue a casa para disfrutar de comer juntas, uniforme al salir del trabajo, zapatos, cartera, llaves, y por supuesto pero no menos importante, supresores y cualquier medicamento que fuera necesario por cualquier cosa. Además del pequeño regalo para Jisoo por su esfuerzo para la obra.

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⏰ Última actualización: Oct 06 ⏰

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When Rosé falls in love | ChaesooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora