1-)¿Quien es Álex?

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—¡Alison! —grito mi mamá entrando a mi habitación — ¡DESPIERTA! ¡VAS A LLEGAR TARDE AL COLEGIO! — abrió las ventanas haciendo que entrara la luz del sol.

Tres cosas que odio.

1-) Los lunes.
2-) El día después del domingo.
3-)Hoy.

— No mamá — hablé con voz soñolienta — no quiero ir.

— Dame una buena razón porque no quiere ir al colegio.

— Me siento mal — me tape la cara con la almohada.

— ¿Que tienes?.

— Me duele el cabello.

— Eso no es escusa, venga párate — me quitó las sábanas.

— ¿Es obligatorio? — pregunté quitándome la almohada de la cara.

— Si — salió de la habitación — apresúrate que tú hermano ya casi está listo.

Bufe pero me puse de pie, este era otro aburrido lunes; en el cual tengo que ir al colegio y luego al local de mi madre.

Con toda la flojera del mundo fui directa al baño, creo que mi segúndo nombre debería ser Flojera y no Alison .

Salí de la habitación después de estar lista.

— Bebé — llame a mi hermana pequeña — Madie, ven aquí pequeña — la tomé en mis brazos y baje las escaleras.

—¿Ya estás lista? — pregunto mi hermano mayor Sam.

— Todavía no pesado — lo ví mal y senté a Madie en su silla.

— Ya está listo el desayuno — dijo mi mamá colocando un par de tostadas en la mesa.

— Apresúrate enana, no quiero llegar tarde — dijo mi hermano metiendose una tostada completa en la boca.

—¿Cómo puedes hacer eso? — lo ví con cara de asco.

— No preguntes y date prisa.

Yo solo rei y me apresuré a desayunar, al terminar el pequeño desayuno subi corriendo a mi habitación. Al llegar al fin de la escalera casi me caigo por culpa de un juguete de Madie. Cómo persona floja que soy decidí dejarlo allí.

Entre a la habitación tome mi bolso, abrigó y lo más importante; mi teléfono.

—¡ALISON!

—¡YA VOY PESADO!.

Salí de mi habitación casi corriendo, creo que no fue una buena decisión no apartar el juguete.

Al llegar a la orilla de la escalera volví a tropezar con este y caí escaleras abajo, lo único que recuerdo son los gritos de mi madre y que todo se volvió negro.

Ahora veo luces blancas sobre mi, una par de máquinas y hay algo en mi brazo.

Espera.... ¿Eso es una vía intra venosa?.

— ¿Mamá? — fue lo único que puede articular.

Mi cabeza y mi bello cuerpo me duelen, ¿Tan fuerte fue el golpe?.

—¿Mamá? — volví a llamar ya que nadie respondió.

—¡Hija! — chillo está entrando a la habitación — ¿Estás bien? ¿Cómo te sientes?

— Pues bien, obviamente no estoy bien — intente incorporarme en la cama pero no pude, todo me dolía — y no, no me siento bien; todo mi cuerpo duele.

— Por el amor de Dios Alison, ¿Que estabas pensando? — se acercó y me abrazo.

— En que llegaríamos tarde al colegio — correspondí su abrazo — pero creo que eso fue imposible.

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