Nunca te dejare

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Muy buenas chiquillas este relato es del Episodio 8 1/4

❤️❤️❤️❤️

Había estado dos largos años lejos de casa y de Khun Pin, me esforcé todo lo que pude para volver antes, desde el primer día en que me fui, no hubo momento en el que no pensara en ella, mi corazón le pertenecía. Había planeado mi regreso con la mayor discreción posible, para darle una sorpresa que tanto merecía, cuando llegue se molestó más por no avisar y dejar de escribirla frecuentemente.

Fui a mi habitación después de abrazarla de disculparme, sabía que se había molestado y me lo echaría siempre que pudiera, dejé mi sombrero y me quite la chaqueta me refresque un poco en el baño y baje al recibidor,

-¿Donde estas Khun Pin?-Escuche ruido en el comedor.

-Aquí, seguro que tienes algo de hambre.

-Bueno- Tenía hambre de otra cosa, fui al comedor- Podría comer de todo ahora mismo.

-Todavía me molesta cada vez que pienso en ello, cada día os comportáis más como accidentales, ¿Sabes eso?- Entró por la puerta, coloca un plato de galletas y me mira

-No sólo la costumbre de darles sorpresa a todos, mi forma de expresar el amor también es como la de los occidentales- La miré a los ojos, ese fuego ese deseo que permaneció dormido durante el tiempo que estuve fuera renacía de nuevo, la agarre.

Ya la tenia en mis brazos, mis labios la buscaron desesperadamente los suyos, ansiaba todo de ella, mi piel se erizo al volver a sentir sus labios contra los míos, su lengua entrando en mi boca, la agarre con más fuerza, me respondió con la misma intensidad, tomó mi cuello y se aferró a ella.

Mi cuerpo empezó a tomar temperatura, un escalofrío me recorrió el cuello, un cosquilleo renació en mi interior, subí mis manos para desabotonar su camisa, no podía esperar más a tenerla conmigo, mis deseos eran superiores

-Todavía es mediodía, Anin-Mira nerviosa alrededor.

-¿Y que tiene?, Te extraño- la vuelvo a besar, toma mi cuello y agarra con delicadeza, deslizo mi mano por su pecho hasta su cadera, me junto mas hacía ella ,pero el miedo de ser descubiertas persiste en su mente.

-Todavía no está oscuro- Me separe totalmente y me fui a donde está el interruptor, apague la luz y regrese- Ahora lo es- Me acerque de nuevo a ella y la bese.

No podía más con la tensión, su cuerpo traicionaba su deseo también, habían sido demasiados días, noches y madrugadas esperando este reencuentro, mi deseo acumulado era palpable, me incliné para besarla de nuevo, saboree el momento, cuando volví abrir la boca para introducir mi lengua se separó.

-La puerta no está cerrada, ¿Y si alguien?..- La callé con mis besos.

Sentí como su cuerpo vibraba, la rodee con mis brazos, su lengua buscó la mía con pasión, la gire suavemente hasta la mesa del comedor, no podía esperarme a subir a mi habitación, ya había hablado con Prik de que nadie nos molestará, estaba algo más tranquila, nadie iba a entrar a interrumpirnos, iba a cumplir una de mis fantasías, me la imaginaba acostada en esta mesa, haciéndola mía una y otra vez.

La levanté un poco para que se sentará, di pequeños besos hasta profundizar mis besos, la mesa no era muy alta y la seguí, fui acostándola de apoco, aparte un poco el plato, me puse un poco de lado sobre la mesa para tener un punto de apoyo, mi mano se dirigió a su cintura y subí hacía su pecho cubierto por la tela de su blusa, me aparte y la observe, sus ojos brillaban, el calor creció por todo su cuerpo, sus mejillas se enrojecieron, su respiración aumento, volví a besar tiernamente, agarro mi mano.

-Te he extrañado tanto...-Susurró.

-Yo también, no te lo puedes ni imaginar.

Empecé a desabotonar su blusa, con su dedo índice dio un toque a mi nariz, sonrió ampliamente y volví a juntar mis labios contra los suyos, agarro mi cuello y me acerco mas a ella, cuando ya no había nada que desabotonar introduje la mano, aun su ropa interior me estorbaba, no tenía prisa tampoco, nos miramos con amor, deseo, disfrutaba de todo esto, mi rostro se iluminaba al tenerla por fin conmigo.

Khun Pin tomó el borde de su blusa y estiro, no lo dijo con palabras, sabía lo que quería, con cuidado introduje mi mano por su brazo y estire por el hombro para retirarlo, se incorporó para poder retirarlo libremente, me senté sobre mis rodillas y agarre la blusa, se volvió a tumbar y quite despacio del otro hombro.

Cuando lo retire del todo me agache para besar su hombro descubierto, baje hasta su clavícula y continúe hacia abajo, llegando al comienzo de su pecho, me embriagaba de su olor, de su calor, cada trozo de piel que estaba expuesta besaba, con un movimiento rápido volví a su cuello, su corazón latía deprisa tanto como el mío, deje un pequeño rastro de besos, deslice mi lengua por su barbilla.

-Podría morirme ahora mismo, mi corazón late muy deprisa Anil- Me rodeo el cuello y me atrajo a su boca.

-El mío también late muy deprisa, es por ti Kuhn Pin- La bese, sus dedos acariciaban mi rostro, me derretía completamente bajo sus caricias.

The loyal pinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora