》Capítulo once.

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Me levante asustado, sentía como el corazón me latía rápidamente y mi espalda estaba empapada en sudor

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Me levante asustado, sentía como el corazón me latía rápidamente y mi espalda estaba empapada en sudor. La luz lograba entrar al cuarto haciendo que mi ceño se frunza. Escuché algunas voces en el primer piso, quizá la cocina, talle mis ojos con cansancio, tome mi celular de abajo de mi almohada, lo encendí y miré la hora.

"Doce del mediodía. Raro,¿mamá volvió tan temprano? Ah claro, hoy es martes primero, viene el asistente social".

Me estire haciendo que mi espalda cruza, bostece y cerré los ojos intentando sacarme esas ganas de volver a la cama.

Sentí un escalofrío, miré hacia la puerta y vi como estaba mi tío mirándome con asco. Yo me cague del susto, saltando incluso.

-¡¿Que mierda te pasa?!- Grite tirandole un almohadazo a la puerta-Dios,¿no pueden ser normales un día?- Murmure resfregandome el ojos que sentía como picaba.

Escuche como el entraba, abrí los ojos y lo mire, estaba con una sonrisa de par en par como si la abuela hubiera muerto y el hubiera heredado su fortuna. Conociendo a esa señora, eso era prácticamente imposible. Créanme, hace años estoy esperando a que muera y esa vieja chota tiene mejores rodillas que yo.

-¿Adivina que?- Seguía sonriendo como si estuviera en un cumpleaños.

-¿Que?- Dije monótono.

-¡Ahora yo y tu mamá no vamos a necesitar de vos porque conseguimos a un traficante!- Solto completamente extasiado.

-¿Que?- Dije atonito.

-¡Si! Encima el chabon es re confiable, Miguel. Nos dio una planta de marihuana a buen precio- El se sento en la cama mirándome alegremente- Ya no vamos a necesitar más de tu ayuda para falsificar esas notas médicas, nisiquiera vamos a necesitar a la señora esa que viene a ver si tu mamá sigue enferma- Cantorreaba alegre.

Se levantó de mi cama, suspirando alegremente.

"¿Pero que mierda esta diciendo?¿Se le saco un tornillo o que? Dios mio, señor,¿que hace?" Pensaba completamente confundido.

Antes de que el se vaya de mi cuarto, aún sosteniendo el picaporte de mi puerta, con una mirada baja, que se veía algo perdida solte:

-¿Esto es un castigo de mamá?-.

El quedó estático, no parecía haber entendido mi pregunta o al menos eso queria pensar. Entonces decidí reformular lo que había dicho.

-¿Ella sigue enojada?- Trague saliva- Se sopunia que vos la tenias que cuidar, ¿a donde mierda se fueron?-Acuse con la voz algo quebradiza.

El se dio vuelta con una sonrisa grotesca, y silenciandome con un "No" que repetía constantemente, se acercó a mi.

-Miguel, vos sabes que las cosas no son asi- Acaricio mi cabeza- Tu mamá necesita un descanso de ser tu mamá. No le saques ese respiro también- Bromeo.

Child Psychology▪︎ PapufrescoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora