Mi odioso 'maestro' (zoro x ____)

CAP 17

Hola, jé, os acordabais de mi? ¿No? Cuanto ha pasado... ¿más de medio año?

Quería deciros que voy a suspender esta novela...

JÉ ES BROMA, NI LOKA DEL COÑO.

He tenido problemas desde el principio de curso y ahora que se han acabado las clases me siento mucho más relajada tanto personal como académicamente.

Así que he decidido volver, muchas gracias por el apoyo en los comentarios.

Aquí va el capítulo:

(¡Os recomiendo que leáis el capítulo anterior para seguir el ritmo de la historia!)

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-¿Nos han vendido?- pregunta Nami, susurrando.

Yo asiento, después de contarles todo.

-¿Y ahora qué?- pregunta Sanji.

Acordamos un plan de huida. A los pocos minutos, llega Noah con otra bandeja y bebidas. Todos nos miramos entre nosotros y asentimos: habíamos acordado en no comer ni beber nada más, ya que podia contener la sustancia que nos debilitará.

-Noah, ¿podemos hablar en privado un momento?- le pregunto yo.

-Si, claro- me contesta.

Deja las cosas en la mesa y salimos los dos de allí. Nami me asiente con la cabeza, dando a entender que ha comenzado el plan. Noah me lleva a una especie de despacho dentro de la mansión y cierra la puerta detrás de mi.

Para evitar peligro o cualquier tipo de problema, estoy alerta, porque probablemente ya sepa que sabemos todos la verdad.

-Bueno, que querías, preciosa- me pregunta, en tono pícaro.

Está bien, el chico es mono y muy guapo, pero no, no me lo voy a tirar. Y no me van los acosadores, sorry.

-Bueno, sabes que mi hermana Robin tuvo problemas de salud, verdad?- él asiente- Quería preguntarte algo- me callo unos segundos- Resulta que tiene un problema en el pulmón que necesita un tratamiento muy caro, ya que no se ha recuperado bien -digo intentado sonar tímida, con mi cara lo más adorable posible- Y pensé que como tú tienes tanto dinero, y te has portado tan bien con nosotros...- hago una pequeña pausa. Me tengo que sonrojar, si no no colará la mentira. Pienso en Zoro sin camisa y mi cara se pone roja como un tomate-... podrías ayudarnos económicamente.

En cuánto acabo lo miro con una pequeña sonrisa. Él me sonríe con ternura y se acerca a mi para darme un beso en la mejilla. Iugh, que asco.

-Pues claro, hermosa, no tengas vergüenza de pedirmelo- me dice.

¡Bien! Ha funcionado.

-¿De verdad? ¡Muchas gracias!- me lanzo a abrazarlo- ¿Podemos celebrarlo?- y aquí empieza mi plan.

-Claro, tengo unas copas ahí mismo- me dice.

-Deja que lo prepare- le digo. Saco las dos copas y una botella de vino cerrada herméticamente.

La abro y me pongo una copa, la cual marco apretando el dedo en el cristal, por si acaso. Luego, meto sin que Noah se de cuenta, una de las pastillas de Vegapunk que había puesto dentro de uno de los bollos que nos iba a dar en la bandeja. Así, se supone que el que se debilitará será él.

-Brindemos- le digo, dándole su copa- Por el príncipe más generoso- digo con una sonrisa más falsa que su pelo rosa. Enserio. Eso no puede ser natural. Quien se cree, ¿Natsu?