𝐏𝐑𝐎́𝐋𝐎𝐆𝐎

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Cada siglo inspiraba a un nuevo genio para utilizar su mente brillante, pero desde que conoció a aquel cerebrito tan peculiar de seis dedos, supo que sería especial, supo que haría su vida distinta.

—Fuiste una experiencia maravillosa para mí —Habló el ser de un ojo, mirando al hombre frente a él—. Sin tí, esto no hubiera sido posible.

—En cambio, para mí, tú lo fuiste todo. —Respondió con su ceño ligeramente fruncido. Las cadenas aún apretaban su cuello, muñecas y tobillos, estando prisionero en esa pirámide extraña.

Nadie hubiera pensado que un simple mortal alteraría la perversa mente de un ser interdimensional, ni tampoco el hecho de que este sufriría su perdida como si le hubiesen arrebatado un pedazo de su vida.

𝐄fímero - ||𝐁𝐢𝐥𝐥𝐟𝐨𝐫𝐝||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora