Una diosa que ha vivido el mayor parte de su vida sola, hasta que un día encontró algo interesante, desde ese dia, le llegaron varios sentimientos que nunca antes ella había experimentado en el pasado. ¿Lograra superar la prueba del amor?
Todos los murmullos de la gente, al instante fueron silenciados, con solo escuchar a aquella potente voz. Pero cuando voltearon a ver de quien se trataba, se quedaron con la boca completamente abierta.
Era una chica con un aspecto bastante lindo a la mirada de los hombres, pero a la vez muy seria, que era admirada por las mujeres.
Con gran elegancia y rectitud, camino hacia a aquellos dos, que se encontraba en el centro de la multitud.
Y con una voz firme, les dijo a los dos.
-Ustedes, ¿Por qué están haciendo un escándalo a mitad de la calle?
Haru estaba algo confundido, no tanto por la pregunta, si no, porque la gente tenía una mirada de asombro cuando vieron a aquella hermosa chica.
Aun así, el decidió contestarle primero.
Haru: Pues, vera... Esta chica...
-¡¡Acosador!!
Sin haber terminado de decirlo, la chica lo interrumpió de una manera abrupta hacia las palabras de Haru.
-¿Perdón?
-¡Si, este chico es un maldito acosador!
-...
El caballero se quedó en silencio por unos momentos, y después miro a Haru con una mirada seria.
-¿Es eso cierto?
Haru: Por supuesto que no, yo jamás haría algo así.
-Ahh... -Soltó un suspiro-
-Las demás personas que están aquí.
-¿Vieron que el hizo un acto de acoso hacia aquella chica?
Toda la gente de la multitud se miraron de un lado a otro, tenían miedo de ir en contra a las palabras de un noble, sabían que podrían ser reprimidos o desaparecidos en caso de hacerlo enojar a algunos de ellos.
Así que optaron en quedarse en silencio, pero por el otro lado, la chica de la alta nobleza, tenía una sonrisa de triunfo, sabía muy bien que nadie le iría en su contra.
Viendo la situación, parece que no había de otra que tomar las palabras de aquella chica como verdad.
-Ahh... Ya que al parecer nadie quiere hablar, así que no queda de otra que arrestarte.
Haru: ¡¡...!!
Haru: Por favor, juro que no he hecho nada, crea en mí.
Haru estaba sintiendo la enorme presión sobre de él, sentía como era tratado de manera injusta, hasta que alguien entre la multitud decidió hablar.
-Yo estoy en contra.
Todos al voltear, vieron a aquella llegara desprender una aura delicada y muy fina a vista de los ojos, pero al ver su vestimenta, rápidamente se dieron cuenta de quién era.
-¡Quien eres para..
Ella estaba a punto de reclamarle, hasta que vio quien era.
-¡¡Santa!!
Dijo con voz alta.
Haru: ¿Santa?
Vio como todos se inclinaron en señal de respeto, incluso la chica caballero y la que pertenece a la nobleza, hicieron lo mismo enfrente de la santa.
Haru era el único que se encontraba de pie, seguía sin entender que estaba pasando.
-Así que es verdad.
Ella camino hacia donde se encontraba el, se podía notar que tenía una ligera sonrisa en su rostro.
Haru tenía un pequeño presentimiento de que algo raro estaba pasando cuando la vio llegar.
(Plano celestial numero 3)
En un lugar bastante lejano, se encontraban dos hermosas diosas flotando en el enorme vacío del universo, una de ellas tenía un planeta entre sus manos, pareciera que estaba tratando de matar el tiempo mientras esperaba.
-Es jodidamente aburrido...
Movía de un lado a otro varios planetas que estaban en ese sistema solar, hasta que de manera repentina su compañera le hablo.
-Te tengo un lindo chisme.
-No me importa.
Rápidamente la ignoro.
-Oh vamos, no seas así conmigo.
De una manera tierna puso ojitos de cachorrito.
-Ahh... Bien, dime el chisme, pero te lo advierto, si es malo me largo enseguida.
Dejo a un lado lo que estaba haciendo y se enfocó en su compañera.
-Ten un poco de paciencia, a parte no es como si tuvieras algo que hacer.
-Ve al grano –Dijo de manera tajante-
-Bien, bien, te lo diré.
Respiro hondo y le dijo emocionada lo que estaba pasando.
-Sospecho que Minerva tiene algo entre manos, deberíamos investí...
Antes de terminar sus palabras, vio que su compañera se estaba largando de ahí.
-¡¡Espera, no seas así!!
-Es aburrido, me largo.
De manera rápida agarro la pierna de aquella diosa y comenzó a jalarla hacia atrás para que no se escapara, pero al tratar de hacerlo, hizo un movimiento brusco que hizo que terminara destruyendo dos planetas con sus pechos por accidente.
-¿¡¡Que mierdas haces!!?
Grito enojada.
-Quiero seguir contándote el chisme
Ambas diosas comenzaron a pelear en espacio, una destruyo con los dedos de sus pies un planeta, otra destruyo con su trasero y así sería una gran pelea entre dos hermosas diosas a ver quien ganaba.
(Aqui una imagen de como podrían verse el tamaño de una diosa, sus estaturas pueden variar)
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