APRENDIENDO A VIVIR

Cap 58

Narra Lillian
Eran las 10 de la noche y mi hermana ya me llevaba a la casa de Paola, mi Carlitos iba inquieto pues ya tenía sueño pero no se dormía

AndreaG: siento que te estoy perdiendo—soltó de repente—no se porque me siento así y no quiero preocuparte yo sé que ya no serás la misma pero mi corazón así se siente

Lillian: no sé qué decirte Andrea ya que en realidad estoy mal son pocas las veces en las que se me olvida un poco la situación

AndreaG: lo sé—se quedó callada—puedes irte a quedar conmigo un tiempo yo te ayudo con Carlitos

Lillian: iré pronto—la abrazo—gracias por traernos tía Andrea

AndreaG: adiós mi bebés, mañana nos vemos

Entré a la casa y aún seguía la familia Parra ahí también estaba Alessa platicando con Andrea y Vanesa, sol me quitó a Carlitos y yo fui a la cocina por un vaso de agua
Me recargué en la isla y pegué mi frente en mis manos cubriendo mi cara con la respiración agitada, trataba de contener mis lágrimas no quería derrumbarme en estos momentos

Se abre la puerta y se escuchan las voces de los plebes, mi cabeza anhelaba poder escuchar la de Carlos y que todo fuera un sueño

César: todo bien?

Lillian: si solo vine a tomar agua

Regresamos a la sala con toda la familia y fui directo a tomar a Carlitos para subir al cuarto y dormirlo

César: antes de que te vayas no hay mucho que hacer en contra de Ian ya que según no tenemos pruebas pero pusimos una orden de alejamiento el no se podrá acercar a ti

Lillian: muchas gracias plebes

Subí las escaleras y lo primero que vi fue la puerta del cuarto de Carlos, la abrí y entró primero arion y atrás nosotros, las lágrimas empezaron a salir de mis ojos esto dolía mucho

Lillian: neno

Nos acostamos en la cama los tres, con mis manos alcanzo a arion para también abrazarlo, mi bebé lloraba y yo junto con él, en mi otra mano tenía un un dije el cual lo está apretando

Se me estaban acabando las fuerzas de seguir luchando, lo único que mi vida quiere es tenerlo aún lado mío pues este dolor es mi pecho me estaba matando, tengo tanto dolor que mi cabeza aún no logra entender que tú ya no estás aquí, te busco en todas partes esperando que regreses por mí que me digas que no me vas a dejar, duele todo neno, duele hasta respirar

Eras toda mi felicidad, te llevaste mi corazón contigo, daría mi vida por tenerte de nuevo

Siento como alguien me estruja y veo que todos están parados viéndome con tristeza en sus ojos

César: Lillian te estás lastimando

Cristian: César hagarra al niño

Mis lágrimas salían sin parar, no lograba entender que decían pues en mi mente solo se escuchaba la voz de mi nenito

Cristian: Lillian por favor

César le dio a Carlitos a Paola y abrazo a Lillian llorando juntos, Cristian también se abrazó a ellos acariciando la cabeza de Lillian poco a poco aflojando su mano que ya estaba muy sangrada lo cual se les hacía raro ya que el dije era pequeño

Lillian: mi neno, mi nenitoo porque mi amor

Roxana: le damos un tranquilizante

Paola: si tráelo Roxana y tu Alessa podrías hablarle a Andrea la hermana de Lillian y a su mamá

Alessa: si ya le hablo

Roxana me dio el tranquilizante en un té y poco a poco iba perdiendo mis fuerzas César me acostó en la cama y tomó mi mano para apretarla fuerte y poner su frente en ella

Llegaron mis hermanas y mi mamá quienes al verme lloraron más mi hermana Andrea pues sabía que mi mamá se tenía que mantener fuerte

LillianM: Paola tiene alcohol para ponerle en su mano

Paola: si luna mami trae el alcohol

AndreaG: aquí está tu bebé hermana—lo acercó a mi—lo tienes a él, te necesita fuerte porque tú bien sabes que él solo te tiene a ti tú sabes cuánto duele no tener un papá—rompió en llanto—has que el dolor para él sea menos del que nosotros tuvimos lillita él te necesita no te dejes caer mi niña

El llanto de mi bebé resonaba por toda la habitación, Paola trataba de calmarlo dándole su biberón pero él no se se calmaba, el llanto del arion también se escuchaba la casa era un caos en estos momentos

Alessa: Lillian respira, tranquila—se sentó aún lado mío y de Andrea—respira explícate a ti misma que podrás con este dolor que estás sintiendo, explícate que el dolor siempre va estar pero tú vas a saber vivir con el, es difíciles pero tienes a tu bebé míralo está llorando por favor Lillian tienes que ser fuerte

Sin pensarlo dos veces me levanté de la cama y le quite a mi niño a Paola para después volverme a sentar con él en la cama, poco a poco él se fue quedando dormido en mis brazos, lo puse en mi corazón tratando de que él me calmara un poco este dolor, siento que la cabeza de César se recarga en mi hombro y como Cristian y luna nos abrazan a los dos

Odiaba tanto la vida pues me lo arrebato cuando él se merecía todo lo bonito de la vida, la persona persona con un corazón hermoso que siempre nos hacía reír con su bailecito, odiaba todo hasta a mí por seguir viviendo sin él.

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