★ Seis ★

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Todos habían concordado en verse en un bar cerca de la casa de todos.

Lamentablemente, Minho no había querido asistir, por alguna razón, su sexto sentido le dijo que sería mejor que no asistiera.

Jisung decidió no alistarse demasiado, solo se colocó un sweather con capucha gris y un pantalón negro holgado.

Salió de su casa y se encaminó al bar.

Pensó que Felix estaría en el bar, ya que no se encontraba en casa pero cuándo llegó al bar se dió cuenta que no estaba.

No le dió mucha importancia, no tenía porque importarle.

No tenía porque importarle...

No tenía porqué importarle... Repitió en su cabeza.

Pero su corazón se rompió en mil pedazos al ver llegar al pecoso agarrando de la cintura a una chica pelinegra.

Ambos se acercaron y Felix habló un poco fuerte para que le escucharán.

--Chicos, les presento a mi NOVIA, Jihyun.

Todo lo que en ese momento el castaño estaba pensando, desapareció y solo podía recordar una cosa.

Novia Jihyun.

Novia.

Novia...

Novia...

Todos los presentes -que eran amigos del peli azul- se voltearon a ver sorprendidos. Jamás escucharon a Felix hablar sobre una chica, mucho menos en una llamada Jihyun.

--Vaya... Felicidades Lix.- Rompió el silencio Hyunjin.

Los oídos de Jisung se taparon y su vista le volvía borrosa.

¿Había escuchado bien? ¿Esto era real?

Y si que era real, porqué sintió un pellizco bastante fuerte en su brazo izquierdo.

--¿Sí puedes hacerte para allá? Gracias.- Era la pelinegra que tenía el ceño fruncido y le hacía una seña con la mano a Jisung para que se moviera.

Y si que se movió, pero para afuera de aquel bar.

Su audición era nula, no escuchaba nada y solo se enfocaba en correr sin mirar atrás.

--¡Jisung!- Gritó el peli azulado que lo había seguido, pero solo logró cansarse y ser ignorado olímpicamente.

El mencionado solo corrió, corrió y corrió hasta dónde lo llevarán sus pies.

Y estos, lo llevaron hasta la casa de un pelinegro.

Golpeó desesperadamente la puerta del mayor, mientras que su respiración estaba agitada y lágrimas se desparramaban por sus mejillas.

--¡YA LES DIJE QUE DEJEN DE VENIR, NO QUIERO UNA PINCHE TARJET- Espera... ¿Ji? ¿Estas bien?

--Min...- Fue lo único que pudo decir antes de romper en un llanto aún más fuerte que el de antes. Se aferro al mayor intentando buscar protección.

--Oh Ji... Entra, deja te preparó algo.- Limpió las lágrimas de las mejillas del menor con las yemas de sus dedos y lo invitó a entrar.

El castaño entró, aún lagrimeando como loco y hipiando.

--¿Que fue lo que te paso Sunggie?

--E-es que, Fe-felix t-tiene novia.- El llanto se intensificó al mil porciento.--¡Tenías razón! ¡Nunca debí ilusionarme!

Ocultó su rostro entre sus manos mientras sollozaba y el peli negro acariciaba su cabellera.

--Era inevitable Jisunggie, eso iba a pasar si seguían así, pero ya... El no te merece Sung.

--Pe-pero no sé porqué se alejó de mí... E-esta m-muy distante co-conmigo...

--El no te merece, tu eres demasiado para el, quédate a dormir esta noche, mañana puedo hacerte tu desayuno favorito y podemos ver una película.

--G-gracias... Oye...

--¿Sí?

--¿Crees que puedes ayudarme a teñirme el cabello?

--¡Claro! ¡Ire por las cosas para teñirtelo!

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Fin del capítulo

Prometo que la historia no va a ser Minsung, lo juro

565 palabras



°Gloss sabor a...° | JilixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora