Capítulo 904: El posible hermano menor de Minjun

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Capítulo 904: El posible hermano menor de Minjun

"¿Por qué crees que mi mamá esté tardando tanto en salir de ese auto?" preguntó Minjun, entrecerrando los ojos hacia el coche aparcado fuera de su casa.

"Joven maestro", dijo su criada. "Creo que ya lo sabemos".

Los ojos de Minjun se abrieron de par en par mientras miraba a su sirvienta.

"¿No crees posible qu—"

"¡Eso es repugnante!", exclamó. "No estoy listo para un hermano, ¡especialmente de un tipo así!"

"¿A qué te refieres?", preguntó. "El señor Lei es bastante guapo", se rió.

Minjun hizo una mueca. "A mi hermano mayor no le gusta. Me di cuenta. Además, extrañamente se parece a un pepino".

Su criada soltó una risita divertida. "Ya veo", murmuró ella. "Realmente pones a tu hermano mayor en alta estima".

"Por supuesto", murmuró Minjun. "Él es el que nunca me dejará".

Con eso, continuó mirando el auto, quemando agujeros en el elegante exterior.

Mientras tanto, en el interior el coche estaba lleno de silencio.

'¿Menta? ¡listo!'

'¿Lápiz labial? ¡Resistente al agua!'

'¿Cara? ¡Letal!'.

Lena marcaba estas cosas dentro de su mente.

Ni siquiera había pasado una semana, pero ya estaban en su segunda cita. Lei la llevó a un restaurante caro esta vez y hablaron sobre negocios en crecimiento. No era el tema ideal para una cita, pero Lena lo disfrutó mucho.

¡Hacía tiempo que no conocía a alguien que la entendiera tanto!

Ahora, ella normalmente no besaba en la segunda cita, ¡pero ambos eran adultos! Los dos ya tenían más de 30 años, así que no tenía sentido rehuir, ¿verdad?

Parecía que Lei tenía el mismo pensamiento mientras extendía su mano y apretaba el muslo de Lena. Una pequeña sonrisa apareció en los labios de Lena mientras se enfrentaba al carismático CEO.

No dijeron nada.

Ya sabían lo que querían hacer.

Con eso, los dos se acercaron más y más hasta que las puntas de sus narices se tocaron.

Sin embargo, justo cuando sus labios estaban a punto de tocarse, dos alarmas diferentes sonaron dentro del automóvil.

Se sacudieron de sorpresa, sus cabezas golpearon el techo del automóvil debido al ruido sobresaltante.

Los ojos de Lena se abrieron de par en par mientras se apresuraba a apagar la alarma. ¡Había olvidado que lo había programado para la noche!

Sin embargo, era extraño cómo no era la única a la que se le había disparado la alarma en ese momento.

"Mierda", murmuró Lei mientras apagaba también su alarma.

El coche se llenó de un silencio incómodo hasta que Lena decidió romperlo.

"Entonces…" empezó. "Creo que tengo que irme".

"Yo también", dijo Lei, rascándose la nuca.

Lena frunció los labios. Su cita era definitivamente importante. Hacía tiempo que no se sentía así.

Sin embargo, su alarma significó que 'Everyday, Everynight' iba a comenzar pronto.

Lo que ella no sabía era que Lei había puesto su alarma por el mismo motivo.

De matón a ídolo: transmigrando a un programa de supervivencia PARTE 5Donde viven las historias. Descúbrelo ahora