¿Por qué me gusta tanto verlo desde lejos? Se interroga Yuma, perdido en el suelo del hotel, hoy día tuvo la suerte de que en este viaje les tocó compartir habitación, y genuinamente, le encanta la idea de que sea él quien vaya a dormir en la cama de al lado.
Al final, ha aceptado su destino de que le toca verlo desde lejos, no es tonto. Puede escuchar sus pasos sigilosos en la madrugada para colarse a la única habitación individual, la de Harua.
Pero cuando está con Jo, no hay nada que perder, simplemente es un chico dulce que lo llena de alegría, de ilusión boraz y que le acelera el corazón, mucho más que antes, pero sabe que debe contenerse, después de todo es su amigo.
Debió haberse quitado las ilusiones hacía ya rato, saber que no estaba a la altura del planeta del amor, venus. Tan delicado, pero tan hermoso a la vez, después de todo, es el más cálido de todos, a la pureza, a la vida, a la perfección. Cualidades que neptuno necesita para compensar su frialdad y su soledad ¿Qué haría el insolente y pequeño mercurio? No es apenas un poquito más grande que la luna de la tierra, se pierde entre las llamaradas del sol y grita, grita con fuerza, mucha fuerza por algo de ayuda, porque le duele.
Mercurio también necesita un poco de frío, del frío de neptuno, que cure sus quemaduras y lo envuelva en una cálida frialdad amorosa, pero neptuno solo tiene ojos para venus, porque el calor natural de venus es sensualidad y es fertilidad, el calor de mercurio son heridas, son piedras, son defectos como los que Yuma se ve cuando está frente a su espejo.
Los tres más altos salieron a comer, Euijoo, Yudai y Jo. No le molesta como antes, no se muere de envidia porque sabe que es importante para él también.
Jo es distinto a los demás, eso le gusta, su forma tan auténtica de ser. Es amable, generoso, tranquilo, paciente y comprensivo, es todo lo que sí fuera una chica, soñaba con tener... Quien lo viera, aún siendo un chico anhelando a Jo con fervor mientras baja la mirada, el agua cristalina a contraluz de la ciudad, con las pastillas en la mano, se las mete a la boca, y las pasa con el agua de su vaso.
Odia el sabor del vidrio, refleja todo el ambiente de la habitación de muchas formas, entre ellas, con las pastillas traga parte de las lágrimas que después de tanto, al fin puede soltar en soledad al saber que la preferencia de Jo, simplemente lo excluye de la posibilidad de estar con el.
No es que sea necesariamente hetero, le dejó muy en claro que el género era lo de menos en una de esas charlas en el parque, bajo la luz nocturna de las estrellas. Simplemente, Yuma no era su tipo en lo absoluto. A Jo le gustan las personas delicadas, pequeñas, fáciles de proteger, tiernas por naturaleza y que disfruten de esa ternura, Yuma es prácticamente lo opuesto, difiriendo en la parte de la pequeñez y parcialmente en la ternura, aunque seguirá negando la primera.
No es fácil de proteger, no le gusta ser desviado a ser alguien a quien cubrir solamente, tampoco le gusta ser delicado con los demás, el quiere ser fuerte, el se siente fuerte e intenta dar su mejor cara al mal tiempo... Desafortunadamente, le trae tantos problemas y por eso ahora tiene que empastillarse para dormir y no sentirse mal por el, vive en modo automático, bajo la influencia de los fármacos y de su obsesión con el menor.
Pero disfruta como le hace daño.
Cuando está con Jo todo se vuelve tan bonito, cada vez aprende más de el y viceversa, aprenden juntos de una forma poética, que los hace sonreír y hacerse felices mutuamente, le gusta demasiado. También le hace bien cuando están juntos, lo despeja de sus preocupaciones, tal vez si no fuera por su frialdad naturalmente encantadora y dulce, sería el sol de su galaxia, porque lo llena de vida.
El vaso vacío es simple y aburrido, como el mismo se siente cuando piensa en Jo, le duele y le duele mucho, conformarse a verlo de lejos, no quiere, pero lo tiene que aceptar y eso le hace más daño.
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𝐒𝐈 𝐓𝐔 𝐌𝐄 𝐏𝐈𝐍𝐂𝐇𝐄𝐒 𝐐𝐔𝐈𝐒𝐈𝐄𝐑𝐀𝐒 - JoYuma.
FanfictionYuma a veces se perfuma en las mañanas e incluso se cepilla el cabello apenas al abrir los ojos, todo para seguir pasando desapercibido por su compañero Jo, que al parecer, tiene ojos para todos menos para él. Se llena de adornos y sufre de trastor...