CAP 2

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Habían pasado 2 semanas desde que  Reich despertó. Su hijo, Alemania, ya había venido a visitarlo y se quedó un par de días con el antes de tener que volver a dirigir el país. El germánico estaba orgulloso de como su hijo llevaba el mando de su territorio, mucho mejor que de como el lo había hecho. Eso le dió un poco de nostalgia y dolor recordando cuando al despertar preguntó por el japonés y Fascista le dijo sobre la muerte de este a manos de Estados Unidos por unas bombas nucleares. El genocida estuvo melancólico durante toda la primera semana.

Dejando eso de lado, desde que despertó a estado comiendo bastante para recuperar el peso que había perdido, además de que tenía un hambre de mierda, haciendo ejercicio para ganar musculatura. No iba a dejar pensar que porque un estúpido virus que lo volvió Omega iba a ser sumiso. Para nada bebé, el iba a intentar ocultar el que es un omega todo lo que fuera posible. Por suerte tenía la altura promedio de un beta lo cual le facilitaba las cosas. Todo iba bien hasta que se un momento a otro, durante sus entrenamientos, empezará a sentir una calor abrazar su cuerpo. Con un poco de dificultad empezó a caminar hacia las escaleras donde se topo bajando a Italia que apenas lo vio supo lo que le pasaba.

Lo llevó al cuarto y lo dejo ahí para luego llevarle comida para un par de días.

T.R: qué me está pasando? -jadeando-

Italia: estás entrando en celo, es la primera vez que entras en el así que no te puedo dar supresores a parte de que no tengo -cerrando la ventana con seguro, ella y su padre son betas así que no tienen supresores-

T.R: cuanto durará está cosa? -siguiendo con la mirada a la contraria-

Italia: unos 2 o 3 días máximo, tranquilo aquí no te pasará nada

T.R: está bien, me tengo que acostumbrar después de todo...

La italiana se va dejando a su tío Reich solo en el cuarto que le asignaron. Las horas pasaban, la calor se hacía más y más insoportable mientras el cuarto lentamente iba siendo impregnada de un delicioso olor a lavanda. Reich ya se había quitado la ropa para estar más fresco cuando escuchó un toque en la puerta. Sin ser del todo consciente de si mismo fue y abrió la puerta en su estado de desnudez. Grave fue el error de la italiana cuando pensó que sería buena idea dejar la puerta sin seguro. Quién estaba del otro lado de la puerta era nada más y nada menos que China.

El asiático había ido a recoger unos documentos que al japonés menor se le quedaron allí cuando fue a ver a su tío Reich despierto, obviamente el chino no sabía esto último. Cuando llegó vió a Italia muy ocupada llendo de un lado para otro. Se le hacía tarde para una reunión que tenía con su presidente la cuál fue de último minuto. Italia, que todavía no se acostumbraba a tener a Reich despierto y confiando en el chino le dijo que los documentos estaban en una de las habitaciones de arriba y salió corriendo para irse a la reunión. China sin saber de cual de las 4 habitaciones del piso superior hablaba la más joven se dirigió a la primera sintiendo al acercarse un delicioso olor a lavanda. Grande fue su sorpresa ver a Reich, desnudo, jadeante y sonrojado abriendo la puerta con la lujuria desbordante en sus ojos desorientados. Su alfa interior enloqueció al sentir un omega en celo y sin las feromonas de algún otro alfa frente suyo. Sin pensarlo mucho se le lanzó arriba tumbando al contrario al suelo y besándolo con fiereza.

Reich, sin ser ya cociente de lo que hacía corresponde el beso abrazando al alfa arriba suyo con sus piernas y brazos profundizando el beso al abrir la boca dejando al otro recorrer su cavidad bocal a placer.

Reich: alfa~ te necesito~ mgh -dice entre besos y jadeos al sentir como sus pezones empezaban a ser tocados-

China: Omega~ -con un leve desesperó empieza a quitarse la camisa que trae puesta pero recobra la conciencia por unos segundos- no... Esto no puede ser

Reich: -cuando el contrario intenta apartarse se aferra más a él- pero alfa~ -con un ligero tono de reclamo al contrario-

China: no entiendes... Tú ni siguiera deverías estar vivo -sujeta los brazos del germánico y los aparta de su cuello permitiendo que se ponga en una posición erguida- por favor suelta -forcejeando contra las piernas de Reich pero sin mirar para no tentarse-

Reich: -hace un puchero y su omega interior sintiéndose rechazado lo suelta y se va a la cama a esconderse-

China: -aprovecha y sale del cuarto cerrando la puerta con seguro y da una mirada rápida a la habitación de al frente encontrando los documentos que buscaba para entonces irse- (le tengo que contar a ONU)

Mientras el chino se subía a su auto Third estaba acurrucado en su cama sollozando, o bueno, él no sino su omega interior. Para un omega que un alfa sin pareja lo rechace en la intimidad es lo mismo que decirle desagradable, feo, asqueroso y otros insultos parecidos. Solloza hasta quedarse dormido.

Unas horas más tarde Italia Fascista, que, había salido a su trabajo que consiguió para entretenerse, volvía a casa. Al abrir la puerta no ve nada extraño ni huele nada al ser beta. Es entonces que se fija en su teléfono, que normalmente trae apagado, y mirá un mensaje que había de su hija.

Mensaje 🇮🇹:

Papá, el tío Reich está en celo, lo deje encerrado en si cuarto así que no te preocupes ^^

<3 te quiero mucho, besitos

Este mensaje sorprendió un poco al mayor que decidió no acercarse a la habitación de Reich. Los omegas tenían la fama de ser capaces de acostarse con cualquiera en su primer celo. Esto trajo problemas a más de un omega que acabo cometiendo alguna infidelidad o que quedó embarazado de quien no quería.

El harén de ReichDonde viven las historias. Descúbrelo ahora