"Regresé de la Muerte".

CAPÍTULO 1

LUNES 17 DE OCTUBRE DEL 2022

"Desde hace semanas que no sé nada de vos. Lo último que me enteré fue que te fuiste de vacaciones a Córdoba, siempre quisiste ir a descansar a esa provincia. Clara no me quería contar pero, la obligué a que lo haga; aunque ahora que lo pienso, hubiera sido mejor no preguntar sobre tu vida amorosa. Me duele saber que estás bien sin mi, me duele saber que puedas seguir sin mi, vivir sin mi, reír, sonreír, estar feliz, sin mi. Vos allá y yo acá, triste, y dolida. A diferencia tuya, yo no te olvido, y no creo poder hacerlo algún día. Te extraño demasiado Mateo, y no me gusta que nuestra historia termine así. Yo te lo dije varias veces, sos mi vida y sos mi muerte. Sos mi todo. Sin mi todo, soy nada. Te necesito bebé.

Te Ama:

Victoria"

-Dios mio que estúpida era. -Susurré, releyendo algunas cosas de aquella carta que se encontraba en mis manos.

-No amiga, nada que ver. Era normal que estés así, habías terminado tu relación de años hace unas semanas atrás. -Me dijo Clara, mi amiga, detrás mio poniendo su mano derecha en mi hombro mientras trataba de chusmear un toque la carta.

-Ya sé pero, igual me parece una exageración. "Te necesito","sin mi todo soy nada","me duele saber que estás bien sin mi, reír, sonreír" etcétera etcétera... ¿Que corno me pasaba?. -Refuté molesta levantándome de la silla de mi escritorio, me acerqué al tacho de basura y tiré aquella carta.

-Y bueno amiga, eran tus sentimientos. ¿Que le vas a hacer?. -

-No volver a caer en la misma, eso voy a hacer. -Aseguré en un tono firme, mientras me sentaba en la cama. Clara puso una cara preocupada y se arrodilló delante de mi.

-O sea que...¿ya te enteraste?. -Preguntó bajo. La miré confundida.

-¿Eh?¿enterarme de qué?. -

-Ah, no, nada nada. -Río nerviosa y se levantó y se dio la vuelta.

-Clara, dale. Ya me dejaste con la pica, ¿enterarme de qué?. -Me levanté y comencé a perseguirla por la casa, ya que cuando se dio la vuelta abrió la puerta de mi habitación para lograr zafar de la situación.

-No, de nada, ya te dije. No seas pesada Victoria. -Contestó ingresando a la cocina.

-¿Victoria?.Ah mira, ¿ya no soy más Vic?. -La vi abrir la heladera y sacó una botella con agua.

-Perdón, "Vic". -Dijo y tomó el agua. Está nerviosa, lo sé porque cuando se pone así comienza a hacer cualquier cosa con tal de distraerse. Además me llamó por mi nombre completo, eso es raro.

-Clara. -La llamé. Guardó la botella y me miró. Levanté una ceja y seguí mirándole. Ella esquivó la mirada y salió de la cocina casi a los trotes. ¿Que le pasa?.

-Déjame Vic, no te voy a contar. -Se sentó en el sillón y prendió la televisión. Yo me paré enfrente de esta.

-Somos amigas, debes contarme. Yo te digo y te muestro todo, ¿por qué vos no?. -Bajó la mirada.

-Es que no quiero que te pongas mal. Por eso. -Confesó.

-¿Por qué me pondría mal?. Aparte, si se trata de algo que tiene que ver conmigo o es algo en lo que me vea "afectada" tienes que decírmelo. -Me senté a su lado y me miró.