Capítulo 6.

88 4 0
                                    

Han pasado unas semanas desde que Naruto y Tsunade habían empezado su alocada relación, ambos habían hecho lo posible por mantenerlo en secreto pero hubieron ciertas personas que se habían dado cuenta, entre ellas Ino y Sakura (que también sabian sobre lo que le habia sucedido a la Senju y sobre el jutsu prohibido de Naruto) ya que ambas eran muy cercanas a Tsunade y a él. Ambas Kunoichis no habían mostrado ningún inconveniente o rechazo por la relación secreta de ambos a pesar de que las había sorprendido en gran manera, también aceptaron mantener esto en secreto para todos los demás. Naruto también sospechaba que muy probablemente Kakashi se había dado cuenta ya que su Sensei no era alguien al que pudieras engañar tan fácilmente.

Tsunade se encontraba de guardia y lamentablemente para ella, su compañero no era el mismo de siempre. Naruto había sido enviado a una misión a la aldea de la nube junto con un pequeño grupo conformado por otro anbu, Sai y Rock Lee. La anbu que estaba suplantando a Naruto era una chica agradable, aún así Tsunade ya se moría por que su amante volviera pronto, aunque desgraciadamente tardaría al menos unos 7 o 8 días en volver de dicha misión. No había pasado ni el primer día y la Senju ya extrañaba tenerlo cerca, cuando tenían que hacer guardia juntos habían creado un "pequeño juego" en el que Naruto creaba dos clones de sombra para que los reemplazarán por unos minutos mientras que él y ella tenían sexo en varios lugares donde no pudieran ser vistos. Se había vuelto una costumbre que ella se negará a aceptar dicha locura diciendo cosas como: No es correcto, nos meterás en problemas, sera algo irresponsable. Pero al final el rubio siempre se salía con la suya. Las horas pasaron y finalmente su turno de guardia había terminado, ella se retiro asta las instalaciones anbu y esperaría asta que se le encomendara una nueva tarea.

Cuando la rubia llegó a las instalaciones se dirigió a los vestuarios y se quito su máscara. Se preguntó que tan lejos estaría Naruto de llegar a la aldea de la nube, si él también estaría deseando que la misión acabará rápido para poder volver a casa y estar juntos nuevamente. La Senju sonrió cuando la imagen de su amado apareció en su mente, si alguien años atrás le hubiera dicho que se acostaría con ese rubio cabeza hueca y que se terminaría enamorando de él, se habría reído a carcajadas y luego lo hubiera mandado a volar de una patada. Pero ahora mismo entendía que no podía vivir sin esa sonrisa cálida, sin sus besos y caricias. Estar junto a él ahora era tan necesario como respirar. Sabía que en cualquier momento, la vida le daría un gran golpe en la cara, que le negaría seguir viviendo este hermoso sueño, aún no sabia si los sentimientos de Naruto eran los mismos de ella. Ninguno de los dos había hablado de eso aún, él le había llamado "mi amor" en más de una ocasión pero...significaba algo realmente? Fuera de sus miedos, Tsunade sabía que no podía dudar de Naruto, el jamás la lastimaría, él había jurado estar a su lado y Naruto Uzumaki siempre cumplía con su palabra.

Tsunade se mordió el labio inferior al pensar en él, Naruto la había echo suya casi toda la noche como ya era costumbre. No se podía cansar de la forma en la que él la follaba, amaba todas las cosas que le hacía incluso las locuras como el uso de sus clones. Aunque el sexo no era lo único, también amaba los tiernos momentos que pasaban juntos, como estar en el monumento Hokage apreciando las estrellas, ella recostada sobre él, sus fuertes brazos abrazándola con cariño y dulzura. La paz y tranquilidad que sentía junto a él era algo que hace mucho tiempo creyó que ya no volvería a conocer.

- "Naruto...vuelve pronto...mi amor."

/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/*/

Naruto junto con su equipo habían tardado 2 días en llegar a la aldea de la nube y justo ahora salían de la oficina del Raikage, acababan de recibir la información necesaria para la misión que ejecutarían junto a Killer Bee. La alianza que se había creado entre las aldeas durante la guerra había fortalecido los lazos entre países, por eso se hacían misiones en cooperación con otros miembros de las cinco naciones. Naruto miraba de un lado a otro ya que era la primera vez que estaba en esta aldea, habían algunas vistas increíbles, las nubes que adornaban la villa eran espectaculares. Al ir tan inmerso en sus pensamientos no escucho como killer lo llamaba.

No Puedo Perderte. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora