la calma

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La tristeza me abruma, la calma desapareció dejando solo caos. El silencio se convirtió en gritos. Gritos qué nadie escuchaba porque estaban dentro de mi. Yo gritaba, nadie escuchaba. Había perdido la calma. La esperanza. Ya no me quedaba nada. Solo ese vacío en la boca de mi estómago qué me demostraba lo desesperada qué estaba. Desesperada por volverme a sentir en paz. Desesperada por ser feliz. Pero sin esperanza, sin calma, no había nada más que hacer. Lo perdí todo sin perder nada. Nada fisico almenos, nada que se pueda tocar. Perdí el control de mi corazón, perdi la fe en la vida, perdi todo. Y caí, cai fuerte y profundo. Entonces solo entonces, cuando ya habia perdido todo lo que me hacia yo . Una palabra salio de mi, y pude. Al fin, gritar.

                                   -la que perdio todo

Lagrimas Desde El AlmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora