Era una mañana fresca en Mondstadt, el aire estaba lleno del aroma a hierba recién cortada y las calles se iluminaban con los primeros rayos de sol. Amber, con su típico entusiasmo, caminaba hacia su misión de exploradora. Tenía una larga lista de tareas para el día, pero su mente seguía llena de los pensamientos de la noche anterior. La revelación de TN había sido un shock, y aunque todavía no podía creerlo del todo, había decidido apoyarlo sin importar las circunstancias.
Mientras cruzaba la plaza, su mirada se detuvo al ver una figura familiar caminando lentamente. TN, con su elegante traje que seguía contrastando con la sencillez de Mondstadt, parecía estar disfrutando de un paseo tranquilo, su expresión relajada mientras observaba los alrededores con nostalgia.
Amber sonrió para sí misma. Era una oportunidad perfecta.
Amber: ¡TN! -lo llamó, apresurándose para alcanzarlo.
TN se giró, su rostro iluminándose con una sonrisa al ver a Amber.
TN: ¡Amber! Qué coincidencia encontrarte tan temprano.
Amber frenó justo a su lado, cruzando los brazos con una sonrisa traviesa.
Amber: Sabía que estabas en Mondstadt, pero no esperaba verte paseando por ahí como si nada. ¿Qué estás haciendo?
TN se encogió de hombros, mirando a su alrededor.
TN: Solo estoy visitando algunos lugares nostálgicos. Hace tanto tiempo que no caminaba por estas calles... me trae muchos recuerdos.
Amber lo miró por un momento, y entonces, con su habitual energía, no pudo evitar hacer una propuesta que sabía podría ser descabellada.
Amber: Bueno, estaba pensando... Tal vez podrías acompañarme en una de mis misiones de exploradora hoy. Pero claro, siendo un noble, supongo que no te gustaría ensuciarte las manos ni enfrentarte a unos cuantos hilichurls, ¿verdad? -su tono era claramente una broma, esperando una negativa educada por parte de TN.
Pero para su sorpresa, TN sonrió ampliamente, sus ojos brillando con entusiasmo.
TN: ¿Bromeas? Me encantaría ir de aventuras contigo, Amber. Ya hace mucho tiempo que no me ensucio las manos y paso un buen rato como antes. Cuenta conmigo.
Los ojos de Amber se abrieron de par en par por la sorpresa. No había esperado una respuesta tan positiva.
Amber: ¡Espera, espera! ¿De verdad? ¿Tú, un noble de Mondstadt, quieres ir a cazar hilichurls y saltar de árbol en árbol conmigo? -su tono era entre incrédulo y divertido.
TN se echó a reír, con una expresión de satisfacción.
TN: Por supuesto. No lo hice durante todos estos años, pero eso no significa que haya olvidado cómo es divertirse. Además, ¿quién mejor que tú para recordarme cómo se hacen las cosas por aquí?
Amber no pudo evitar sonreír ante eso. Era como si una parte del TN que conocía de niño seguía allí, bajo esa fachada noble y refinada. Sin perder más tiempo, ella asintió con entusiasmo.
Amber: ¡Perfecto! Entonces vamos, hay muchos lugares por los que podemos pasar, y te mostraré que no he perdido mi toque.
Con ese impulso, ambos comenzaron su camino hacia los bosques y praderas alrededor de Mondstadt, donde los recuerdos de su niñez seguían vivos en cada rincón.
A medida que avanzaban por los senderos, Amber lo miraba de reojo, observando su expresión pensativa mientras caminaban en silencio. Finalmente, no pudo evitar preguntarle lo que estaba en su mente.