El cielo guarda un secreto que nadie se iba a imaginar que pudiera existir, únicamente Azrael y Dios sabían de ese secreto ya que era un misión que debía cumplir para que todo hubiera un orden. El secreto que tanto había guardado por millones de año...
-Qué bueno que encontró a Alastor- susurra en la oficina
Sonríe -así es y eso es lo bueno porque estamos iniciando desde cero- observa su bastón
Alza su ceja -majestad está tomando una relación con él?-
Ladea su cabeza -algún problema?-
Niega -no sólo me parece extraño pues desde su separación con Lilith ya no estuvo en una relación-
Se inclina en la mesa y hace sus brazos hacia atrás sujetándose -lo sé pero su orgullo y prepotencia hizo que me obsecionara al principio en que sea mi sumiso pero poco a poco me dí cuenta que me gusta así, he permitido que me llame por mi nombre-
Se sorprende y mira hacia otro lado -que bien por usted majestad, espero funcione-
-Pero al parecer a tí también te va bien con Lucifer- lo observa
Refleja una sonrisa -así es incluso ya vamos a dormir en la misma habitación-
Frunce el ceño -tú durmiendo en la misma habitación con él?-
Juega con su micrófono -si creo que nosotros vamos también muy bien como ustedes-
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-La verdad no lo había pensado pero es una brillante idea él compartir la misma habitación, gracias mi querido ciervo por esa idea- camina hacia la puerta -vamos?-
Salen de la habitación y caminan hacia la sala principal pero se da cuenta que Alastor está en el otro extremo caminando, le dice al otro Alastor que se adelante y camina hacia donde está él -sucede algo?-
-No nada solo estoy caminando sabes que no me agrada estar aquí- su mirada reflejaba tristeza pero trataba de sonreír lo más que podía
-Si quieres vamos a despedirnos y nos retiramos no quiero que te sientas incómodo- le acaricia su rostro
Lucifer se da cuenta desde lejos como lo tienen y medio ve Alastor que lo están viendo, decide darle un beso para que lo viera sintiéndose con un gran dolor al ver lo que está pasando, regresa a la sala y al rato llegan ellos
-Bueno fue un gusto verlos y les deseo mucha suerte ahora que van a compartir la misma habitación- sonríe
Alastor y Lucifer sintieron un golpe por las palabras del otro Lucifer y sin decir más se retiraron de allí regresando al palacio
Gabriel estaba observando todo lo que había pasado molesto y decide aparecer en el estudio esperando que Lucifer llegara susurrandole que llegara al estudio
-Si quieres ve a tu habitación iré al estudio sólo necesito ver unas cosas- lo observa
Asiente y se retira, entra al estudio y observa como Gabriel estaba recostado en la pared con los brazos cruzados con un rostro de molestia -me puedes decir qué carajos está pasando? Teníamos un trato la cuál no estás cumpliendo-
