One Shots Drarry +18

Reencuentro

Hay dos cosas que para Draco Malfoy es un sufrimiento, Numero uno: Que su pelo no se vea perfecto, Numero dos: Llevar mas de 2 días sin ver a su novio, pero en este caso era peor, ya que no llevaban dos días sin verse, ni cinco, ni dos semanas, era nada mas y nada menos que tres meses sin verse, tres meses sin contacto físico; sin abrazos, sin besos, sin nada. Por al menos para Draco, el apreciaba mucho los gestos de cariño, las palabras, la lealtad, pero para amar también necesitaba tocar, habían días en los que solo quería estar durmiendo con su Harry abrazados sin preocupación alguna, cosa que no podrían por ahora ya que alguien decidido irse a ayudar a sus tíos en una campaña de salud en Manchester.

—Voy a llegar el otro mes, lo juro—Dijo Harry. 

—¡Eso dijiste el pasado!—Exclamo Draco. Ambos se encantaraban en una de sus llamadas nocturnas.

—Si, si, pero esta vez te lo juro por mi madre que voy a regresar a Londres.

—Aja, y yo soy el rey de Narnia.

—¡Draco! Esta vez lo digo en serio.

Mientras Harry decía una y otra vez que le creyera que esta diciendo la verdad, Draco reía, pero muy en el fondo tenia algo de tristeza, Aun así se alegraba y veía como una razón de presumir el hecho de que su novio tuviera un corazón tan bondadoso y este dispuesto siempre a ayudar, Harry no seria Harry sin esa cualidad, de igual forma puede conformarse por un tiempo con las videollamadas y los mensajes.

(...)

La semana de Draco estaba siendo muy tranquila y agradable, Había ido a la casa de sus padres, no estuvo lleno de estrés por la universidad, nadie lo había hecho molestar, Bueno. Por ahora, y lo mas importante, su pelo se veía perfecto y su novio le confirmo que en cuestión de semanas volvería.

Suficiente para su tranquilidad.

Para finalizar su día va a pedir algo de comer y se va a acostar a dormir relajado porque es viernes y no hay mejor día para dormir que un viernes. Aunque parece que su siesta se tendrá que posponer un poco ya que alguien esta tocando la puerta y no puede ser el repartidor porque acaba de pedir, entonces tiene que ser Pansy o Blaise y es imposible lograr sacarlos de su apartamento una vez que ponen un pie dentro.

Lo de que nadie había hecho molestar a Draco se acabo porque empezaban a tocar la puerta mas veces, un poco mas y la tiran. El rubio con pocas ganas se dirigió a la puerta para abrirla. 

—Pansy, Blaise o  quien sea que seas quiero que sepas que te voy a partir la cara—Dijo unos segundos antes de abrir la puerta, pero su expresión cambio completamente al ver a la persona que estaba detras de esa puerta.

Pelo negro, algo despeinado, con ondas como la de las olas, pero que se veía extrañamente bien, mas una piel ni muy blanca ni muy oscura como el color de la canela y unos ojos verdes color esmeralda que hacia un contraste extraño, pero hermoso. 

Era Harry.

Pese a que Draco se quedo unos segundos paralizado observando a Harry sin creerlo, no tardo nada en darle fuerte abrazo que lo podía dejar sin aire en algún momento.

—Pensé que te quedarías ahí parado como imbécil sin decir alguna palabra.

—Estúpido—Dijo Draco mientras lo abrazaba y lloraba, no por tristeza, sino por la felicidad de poder tenerlo ahí.

Harry se separo un momento y lo tomo de la cara para verlo—¿Por que te ves tan triste? La idea era que te alegraras—Luego de decir eso se acerco mas a su rostro y le planto un beso.

—¿Por que no me dijiste que venias?— pregunto Draco que se notaba aun sorprendido.

—Era una sorpresa.