Zi Fei Yu

Capitulo 19

Ji Leyu miró los mil yuanes que aparecieron de repente en su cuenta y supo que debía ser el bono de Lin Fei.

Desde la infancia, cada vez que Lin Fei ganaba dinero, ya fuera por trabajos de medio tiempo o bonificaciones, siempre le daba a Ji Leyu un tercio, y los dos tercios restantes se dividían entre Lin Luoqing y Ji Yuxiao.

Pero cada vez que Ji Leyu intentaba devolver su parte a Lin Fei, Lin Fei se negaba.

Cuando Ji Leyu era más joven, le preguntó a Lin Fei por qué, y Lin Fei le dijo: —Eres el hermano menor; no necesitas darme nada.

Lin Fei siempre tenía sus propias razones y lógica. Ji Leyu no podía discutir con él, por lo que no insistió; después de todo, siempre habían vivido y comido juntos, por lo que no había necesidad de ser tan exactos con las divisiones.

Visitó la pastelería que había marcado como favorita, eligió un pastel y le pidió al dueño que se lo entregara alrededor de las ocho de la tarde.

Como Lin Fei había ganado un premio, Ji Yuxiao canceló sus planes de cenar y regresó a casa temprano, después de haber pedido una mesa de platos.

Cuando Ji Leyu llegó a casa y lo vio, se sorprendió un poco.—¿Por qué llegaste a casa tan temprano hoy?

—Como tu hermano ganó el primer lugar, pensé en celebrarlo con él.

—Justo el momento; pedí un pastel— susurró Ji Leyu.

Ji Yuxiao sonrió mientras alborotaba el cabello de Ji Leyu, luego pareció un poco arrepentido. —Es una pena que tu papá no esté aquí.

—Es fácil. Podemos programar una videollamada para que él pueda participar virtualmente.

Ji Yuxiao se rió de buena gana: —Sólo a ti se te ocurren esas ideas.

Ji Leyu parpadeó, le guiñó un ojo y luego le envió a Lin Luoqing una invitación en video.

Lin Luoqing miró la mesa llena de platos y el pastel en el centro, luego miró su propio plato de arroz frito y suspiró: —De repente, mi arroz no parece tan apetitoso.

Aunque dijo eso, la sonrisa en sus ojos era imparable. —Feifei, ¿hay algo más que quieras? Papá te lo comprará. Y Xiao Yu, ¿Quieres algo? ¿Qué tal si te compro un auto también?

Ji Leyu se negó: —Estoy bien con el auto de mi hermano. Además, ya hay demasiados autos en casa.

—Entonces, ¿Qué tal si te compro una motocicleta? —sugirió Lin Luoqing—. Pueden turnarse para usarla. Pueden usar la que quieran.

Ji Leyu se interesó de inmediato. —Genial, entonces también puedo llevar a mi hermano a la escuela.

Lin Fei levantó una ceja.—¿Me llevarás?

Ji Leyu le preguntó: —¿Qué? ¿No puedo llevarte?

—Te llevaré.

—Eso también funciona.

 A Ji Leyu no le importó.

Cuando Ji Leyu tomó a Lin Fei, significaba que Lin Fei lo estaba sosteniendo; cuando Lin Fei lo tomó, significaba que Ji Leyu estaba sosteniendo a Lin Fei.

Ya sea que Lin Fei lo estuviera sosteniendo o que él estuviera sosteniendo a Lin Fei, a él no le importaba en absoluto.

Entonces Ji Leyu pensó en algo y quiso advertirle a Lin Fei que no llevara a nadie más, ¡ni siquiera a Jiang Jingshuo!l

Sin embargo, como Lin Luoqing y Ji Yuxiao estaban presentes, Ji Leyu se sintió demasiado avergonzado de decirlo frente a ellos. Decidió esperar hasta que estuvieran solos en su habitación para contárselo a Lin Fei.