Capítulo 3: La conexión

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Días se convirtieron en semanas, y Jimin se encontraba en la tienda de Lee cada tarde, aprendiendo a tocar el gayageum. La música se había convertido en su refugio, su lugar de escape de la presión y el estrés de ser un ídolo.

Lee le enseñaba más que solo notas y acordes. Le enseñaba a conectar con su alma, a dejar que la música fluyera desde su corazón.

"La música es un viaje interior", decía Lee. "Debes dejar que tu corazón hable."

Jimin se sentía conectado a Lee de una manera que nunca había sentido con nadie antes. Era como si Lee entendiera su alma.

Un día, mientras practicaba, Jimin se sintió abrumado por emociones. La música parecía expresar todo lo que él no podía decir.

Lee lo miró y sonrió.

"Estás conectando", dijo. "Estás dejando que tu alma hable."

Jimin asintió, lágrimas en los ojos.

"Gracias, abuelo", dijo.

Lee lo abrazó.

"Eres un músico verdadero, Jimin", dijo. "Tu música puede cambiar vidas."

Jimin se sintió orgulloso. Por primera vez en mucho tiempo, se sentía como si estuviera haciendo algo que realmente importaba.

"Quiero tocar para los demás", dijo.

Lee sonrió.

"Pronto", dijo. "Pero primero, debes aprender a tocar para ti mismo."

Jimin asintió. Sabía que Lee tenía razón.

La Melodía Del AlmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora