CAPIRTULO 2

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Una vez que ya habían llegado a la puerta del aula de química, las dos chicas se quedaron mirando, hasta que Kyshla habló.

–Bueno, es esta clase. Pásatelo bien con lo que quiera que vas a hacer con eso.–Señaló la caja.

–En realidad lo que tengo que hacer es colocar todo esto en las estanterías, nada entretenido.

–Si quieres te ayudo.

–Claro.

Kyshla acercó la mano al pomo de la puerta para abrirla pero justo cuando lo iba a hacer se oyó un ruido que provenía del interior, pasos y susurros que la invitaban  a pasar, sola, al aula.

–Abre que esto pesa– se quejó Amy, pero Kyshla hizo caso omiso–. Lo digo en serio, si no abres la puerta ahora la abriré yo misma de una patada.

Kyshla la abrió pero no había nada ni nadie dentro, se quedó analizando la sala pero no encontraba nada por el suelo que hubiese podido provocar aquel ruido. Tanto tiempo estuvo analizando la sala que no se dio cuenta de que su amiga la estaba mirando fijamente.

–¿Te pasa algo? Digo, estás mirando la sala como si hubieses visto un fantasma.–Le preguntó Amy

–¿Eh? No, nada– contestó la otra chica, pero algo en su voz hacía que Amy no la creyese–. Vamos a colocar esto, tenemos para rato.

–Vale.– Dijo Amy, no muy convencida.

A los pocos minutos a las dos jóvenes se les había olvidado lo ocurrido anteriormente, se encontraban jugando con los materiales de la clase, gastándose bromas y alguna que otra vez volaba por los aires algún objeto. Lo importante es que las había echo olvidar. Por otro lado, el estar tan entretenidas no les había permitido darse cuenta de que estaban siendo observadas desde el otro lado de la puerta.

Hora y media después las chicas estaban exhaustas, no pensaron que el fácil trabajo de colocar las cosas de una caja en su lugar fuese tan cansado. No fue hasta que empezaron a sentir agujetas en sus brazos, que se dieron cuenta.

–Yo... No sé tú pero yo me voy a clase.– Dijo Kyshla con la voz entrecortada por el cansancio.

Amy miró su reloj e instantáneamente se le abrieron muchísimo los ojos, Kyshla llegó a pensar que se le saldrían de las órbitas.

–¡Llevamos casi dos horas aquí!– Gritó horrorizada.

–¿Dos horas? ¿Dos horas de clase perdidas?–Kyshla estaba más atemorizada que Amy seguro, pues ella era la alumna ejemplar y ya se había saltado dos clases en el mismo día– ¡Vámonos ya! ¿Qué te toca a ti ahora?

–Economía

Kyshla soltó una risita, sabía que la profesora de economía era de las peores que hay en todo el instituto, y sobre todo exigente con la puntualidad.

–¿De qué te ries?

–De nada, buena suerte– se limitó a decir Kyshla y acto seguido salió corriendo hasta su siguiente clase, literatura, con un poco de suerte la dejarían entrar como si nada.

El timbre que marcaba que era la hora de ir a comer algo sonó y una manada de adolescentes hambrientos salió corriendo de sus respectivas clases, exceptuando a Kyshla, ella siempre era la excepción, en todo. Kyshla se fue hacia su taquilla, quería coger un libro para leerlo tranquilamente sentada a la sombra de un árbol en el patio, mientras todos los demás socializaban. Cuando abrió la taquilla, de ella salió un pedazo de papel con algo escrito.

<<Ky a las 15:00 nos vemos en la entrada del instituto. Ven sola

Fdo: æ >>

La joven se extrañó, solo había una persona que la llamase así. Y estaba muerta.

La joven miró el reloj y se dio cuenta de que solo faltaban quince minutos para las tres en punto.

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En el capitulo siguiente comienza lo verdaderamente interesante!!!!!!!!

xoxoxoxo

_Yo_Soy_Yo_ 

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⏰ Última actualización: Jul 15, 2015 ⏰

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