¿La muerte perdona? (Higuel)

HILO

A la mañana siguiente volví a la rutina de siempre ir a casa de Hiro, pero al llegar no estaba, ni siquiera Baymax, no me preocupo tanto ya que parecían uña y mugre incluso me pregunte si iban al baño juntos.

Pasaron las los minutos que se convirtieron en horas, estas en días, específicamente 5 días sin saber de el, creo que estuve encerrado en su habitación, sin comer, sin beber agua, solamente acostado en su cama esperándolo... Esos dias la verdad no lo recuerdo, mi mente se nublo sin su presencia...

Pero un día al abrir los ojos note a alguien pero no era la persona que tanto estaba esperando, no era el.

Era Daniel, ¿Porque está aquí? No quiero que esté aquí.

-¿Que haces aquí?- Dije levantándome de la cama.

- Supongo que haciendo tu trabajo Rivera - Dijo acomodando mi camiseta.

-¿Le hiciste algo?, ¿¡Donde esta?!.

- Cálmate Miguel - Dijo levantando las manos - Tu trabajo es mucho más fácil con el, pero al parecer necesitabas ayuda así que te la di. 
Pero no te preocupes no me llevaré todos los créditos.

No podía responder, la simple idea de que el le haya hecho algo a Hiro para ayudarme no me cabía en mi cabeza. Además Daniel  tampoco ayudaba a qué me consentrata.
Sus ojos castaños, su cabello pelirrojo,  su cara en general me idiotiza.

Apesar de que lo nuestro ya tenia bastante tiempo de haber terminado el todavía tenía cierto control en mi. 
Pero no tanto como otra persona.

-¿Hiciste el encargo?- Logré decir.

-Creeme lo quería hacer, pero solamente te ayude un poquito.- Dijo acariciando mi pelo.

-Entonces, ¿Donde esta?- Dije quitando sus manos de mi.

Su expresión cambio a una muy seria y fría.

-¿Te importa mucho?, ¿No?

- Más de lo que creés, ¿Donde esta?

-Solo espero que esto no te cueste tan caro Rivera, sabes lo que pasa  si no cumples. Y no sabes lo que me duele a mi. - Dijo Daniel sacando un papel de su bolsillo del pantalón.
-Esta en ese hospital, está pendiendo de un hilo.

No escuché más y me fui directo al hospital, después de buscar y buscar encontré su habitación, estaba en una cama conectado a múltiples cosas, a su lado una mujer recostada en el sofá, estaba dormida. Y claro que no podía faltar Baymax que solamente estaba ahí parado, no tardo mucho en notar mi presencia.

-¿Que le paso..?- Dije susurrando.

- La misión no salió como esperaban y Hiro resultó gravemente herido- Dijo Baymax en un tono bajo.

-¿Que misión? - Dije acercándome a Hiro. Verlo lleno de raspones y moretones me hizo un nudo en mi garganta,  su cara tenia varios raspones, pero su pelo rebelde tapaba varios de ellos.
- Todavía no te puedes ir Hiro, Yo todavía no estoy listo, por favor, por favor.

-No estoy autorizado a decir más aserca del accidente. - Dijo Baymax.

-¿Porque?

No pude decir más cuando un grupo de cuatro personas entro a la habitación. Hubo un silencio incómodo

-¿Quien eres?- Dijo una chica de pelo corto.

- Miguel Rivera.