Capitulo 2: Solsticio

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TW: Mención de la situación de Stan en Tijuana (posible comercio sexual, canon en mi historia).

Vamos a hablar de situaciones sexuales con falta de consentimiento, un tema que se repetirá en la historia. Asesinato de personajes secundarios.

Leer con discreción.





Se había alejado bastante de Gravity Falls, al punto que los suaves copos de nieve que caían de las nubes fueron reemplazados por una lluvia torrencial que hacía imposible conducir a alta velocidad, condujo hasta que se le acabo el tanque de gasolina y tomo el mapa del asiento del copiloto para poder ubicarse en la carretera. Estaba a cientos de kilómetros de la cabaña de Stanford y a otros cientos de donde solían vivir sus padres, era un punto medio entre las personas que solían considerarlo 'familia'. 

Observó el interior su auto detenido al borde la carretera con cariño, abrió la ventana para fumar el ultimo cigarrillo que celosamente tenia guardado en la guantera y acaricio el volante, agradecido del pedazo de metal que fue su único compañero durante años, el humo que expulsaba de su boca se escapaba al frio y se difuminaba con la lluvia, Stan se sentía igual de desgastado como su vehículo.

Verifico que todo sus documentos estuvieran dentro de su billetera y haber sacado lo que consideraba de valor del auto, había escondido celosamente en la oficina de la cabaña todos sus documentos con sus falsas identidades, esperando no volver a recurrir a ellas nunca más, ya estaba cansado de fingir ser alguien que no era, si ser Stanford Pines traería a su hermano de vuelta, no tendría problemas en hacerlo y luego simplemente desaparecer de la existencia, deseaba una disculpa, claro que si, pero también volver a lo que eran hace mas de 10 años, y si no iba a tener ninguna de esas dos cosas al menos le iba a arrancar a la fuerza a Ford la satisfacción de restregarle en su engreído rostro de "sabelotodo" el haber sacado su trasero de ese maldito portal.

Con una sonrisa y esta idea quito el freno de mano, luego se bajo de su auto cerrando la puerta con cariño y camino al precipicio, en sus manos tenia todos sus documentos e identificaciones personales, se desprendió de ellas lanzándolas al vacío con fuerza y volvió la mirada a su auto, camino detrás de este y haciendo uso de la fuerza que tanto lo enorgullecía lo empujo por el mismo acantilado, el sonido del metal machacándose contra el suelo fue eclipsado por una brillante explosión anaranjada, la condenada chatarra se fue en grande.

El agua comenzaba a filtrarse por sus botas, así que sin mas se puso a caminar por donde había venido, había planeado todo con cuidado, sabia perfectamente que estaba a por lo menos 20 kilómetros de la civilización mas cercana y que por esa carretera no deambulaban autos. El viaje de ida le tomo medio día completo para llegar a su destino, pero volver a Gravity Falls haciendo "autostop" le tomo otros dos días.

. . . . .

De eso, ya habían pasado tres semanas, y todo lo que estaba en su cabeza era pasar una blanca navidad con Fiddleford H. McGucket, él no lo iba a negar, casi se orina de risa al oír el nombre del sujeto salió de sus labios por mera casualidad, el flacucho de lentes pequeños seguía guardando una distancia prudente de él, y eso solo hacia que Stan jugara mas al gato y al ratón por medio de no muy sutiles coqueteos. Fiddle iba cada sábado y jueves sin falta a la cabaña a revisar el estado de la herida de Stanley, y este aprovechaba el contacto físico para hacer lo que llamaba "hacer gala de sus encantos", sin embargo, si bien McGucket se alejaba sonrojado, claramente también lo hacia sentir incomodo, y paulatinamente decidió dejar de forzar conseguir algo del hombre de esta manera, después de todo se mentiría a así mismo si negaba que adoraba tener compañía.

Era 22 de diciembre, estaba en el centro urbano del pueblo luego de ir a engatusar a la hija del dueño de la casa de empeños e intercambiar algunas de las pertenencias rara de que parecían valiosas de Ford, su número de teléfono -el cual dio de mala gana pues la muchacha era demasiado ansiosa por él para su gusto- a cambio de varios billetes de los grandes, entre su despensa llena y la falta de cuentas adeudadas por pagar, podría seguir vendiendo cosas o hacer pequeños trabajos por el siguiente año sin necesidad de buscar empleo, y así enfocarse completamente en poder reparar el portal.

Susurros en el Bosque [FiddleStan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora