Prologo - La llegada

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El Olimpo

En el salón del trono de los dioses del olimpo se estaba llevando a cabo una importantísima reunión entre los más poderosos, antiguos y sabios dioses.

Zeus: Ya les dije que yo soy el favorito de mamá.

Rugía el rey de los dioses.

Poseidón: De que hablas chispitas si el favorito de mamá siempre fui yo.

Le respondía su hermano mayor.

Hades: Aghhhhh, como si no supiéramos que ella me prefiere a mí.

Ambos: ¡¡TU CALLATE MALDITO ALIENTO DE MUERTO!!

Los tres empezaron una de sus incansables discusiones habituales.

Mientras tanto Hera, Reina de los dioses, solo miraba a su marido decepcionada de su comportamiento, así como llena de ira por sus más recientes infidelidades, ambas veces con la misma mortal, dando como resultado dos hijos bastardos, pero al menos estos habían sido útiles para el olimpo, pero eso no quita la ira de la diosa del matrimonio ante su infiel esposo.

Atenea se encontraba entablando una seria discusión con Ares sobre cual es el mejor estilo de ganar una batalla.

Ares: ya te lo dije cara de búho, cargar de frente lo más rápido, feroz y brutal posible es la mejor forma de atravesar una línea de defensa.

Nota: ¿Por qué me recuerda a los Chikoz este wey?

Atenea: Y es por esta misma táctica que grandes campañas militares se han visto obligadas a desordenadas retiradas con grandes pérdidas, lo mejor es recolectar la mayor cantidad de información posible del enemigo para así ubicar el punto débil de la defensa y explotarlo.

Por otro lado, Deméter y Perséfone se encontraban charlando tranquilamente la una con la otra sobre plantas, cereales y porque el señor esposo de Perséfone no era un vil secuestrador que la mantenía contra su voluntad.

Hefesto estaba trabajando en algún invento entre sus manos como de costumbre, aunque de reojo observaba a su esposa, la cual se estaba arreglando las uñas como si no estuviera nadie más alrededor.

Dionisio leía una de sus revistas de vinos habituales, suspirando por su aun persistente restricción de su preciado Vino.

Apolo y Artemisa debatían cuales eran mejores en el tiro con arco, si los hijos de Apolo o las cazadoras de Artemisa.

Hermes charlaba tranquilamente con la más calmada y familiar diosa Hestia, la cual se encontraba contenta, ya que, si bien había discusiones por doquier, así habían sido por siglos, y su hoguera demostraba que esta era la forma común de convivencia entre los olímpicos. Agradecía a los semidioses por proteger su hogar en su momento de crisis, y aunque se hicieron muchos sacrificios y daños por doquier, al menos las cosas han ido mejorando, o bueno eso si no se contaba los diversos problemas que tanto su familia divina como su familia extendida les causaban casi sin descanso, especialmente a los pobres semidioses.

Repentinamente, todos los dioses presentes dejaron lo que estaban haciendo, ya que todos pudieron percibir un pico de energía de la nada sobre ellos mismos; un par de segundos más tarde, todos fueron sorprendido de pie fuera de sus tronos y en un lugar que parecía estar en medio del infinito y hermoso cosmos

 Repentinamente, todos los dioses presentes dejaron lo que estaban haciendo, ya que todos pudieron percibir un pico de energía de la nada sobre ellos mismos; un par de segundos más tarde, todos fueron sorprendido de pie fuera de sus tronos y en un...

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⏰ Última actualización: Oct 16 ⏰

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