"Como estas??" preguntó la chica, y Jihyo se volvió para ver a la chica, logrando sonreír cansadamente.
"Bien," suspiró, levantando una mano para hacerle señas a la chica para que se acercara.
"¿De verdad?" Seungwan sonrió, tomando la mano extendida de Jihyo y sentándose cuidadosamente a su lado en la cama. "¿Dónde está la pequeña?"
"Se la llevaron para algunos chequeos," respondió Jihyo. "Pero no debería tardar mucho."
Seungwan exhaló suavemente, apretando su agarre en la mano de Jihyo. "Así que... ahora eres madre."
"¿Sorprendente, verdad?" Jihyo sonrió, encontrando la mirada de Seungwan y admirando cómo brillaban sus ojos bajo la tenue luz del hospital.
Cayeron en un silencio cómodo, Seungwan admirando el rostro de Jihyo. Con delicadeza, levantó una mano para acariciar la mejilla de Jihyo, su pulgar rozando suavemente debajo de los ojos cansados de Jihyo. "Estoy feliz... feliz por ti," dijo suavemente.
Jihyo sonrió, inclinándose hacia la mano de Seungwan y apoyando su mejilla contra ella. Se quedaron así por un momento, simplemente mirándose el uno al otro, su conexión palpable en la tranquila habitación.
No pasaron más de cinco minutos cuando las puertas se abrieron y una enfermera entró, sosteniendo a la pequeña en sus brazos. El rostro de Jihyo se iluminó con una sonrisa radiante al ver a la enfermera acercarse.
"Todo está bien," dijo la enfermera, "Está lista y se quedó dormida durante el chequeo."
La enfermera le entregó suavemente a la niña a Jihyo, quien la tomó con cuidado. "Gracias," murmuro Jihyo, su voz apenas un susurro mientras giraba para mirar a su hija. Sonrió, mordiendo su labio para contener las lágrimas, dejando escapar un suave suspiro al contemplar el rostro dormido de Tzuyu.
Volviendo a mirar a Seungwan, encontró a la chica sonriendo. "¿Cómo se llama?" preguntó Seungwan, la curiosidad evidente en sus ojos.
Jihyo sonrió con orgullo. "Tzuyu."
"Es un nombre hermoso," respondió Seungwan, asintiendo con aprecio.
Jihyo asintió, su corazón hinchado de orgullo. "¿Te gustaría sostenerla?"
Los ojos de Seungwan brillaron de emoción, y asintió con entusiasmo. Jihyo le transfirió cuidadosamente a Tzuyu, observando cómo la chica la acunaba con ternura.
"Es preciosa," dijo Seungwan, mirando a Tzuyu con una cálida sonrisa.
Jihyo sonrió, realmente sonrió, porque no podía ser más feliz. Exhausta, sí, pero inmensamente feliz.
Sin embargo, lentamente, su corazón dolía un poco, casi imperceptiblemente, lo suficiente para que Jihyo pudiera disfrazarlo como emoción, como miedo. Porque la escena ante ella era... diferente.
Seungwan parecía irremediablemente enamorada de Tzuyu, la forma en que la sostenía delicadamente, como si temiera romper a la pequeña. La sonrisa en su rostro era algo que Jihyo no había tenido el privilegio de ver en mucho tiempo.
Y entonces el dolor llegó. Su sonrisa se desvaneció un poco.
Jihyo observó a Seungwan, su mente quedándose en blanco. La escena que estaba presenciando no era suya; no le pertenecía. Esa niña era la hija de Jihyo, la hija de Jihyo y Sungbin. Seungwan no era más que un recuerdo de hace unos años, un recuerdo que aún persistía en su vida, llevando a su hija recién nacida y estando ahí para Jihyo.
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Love warning; Señorita Park [Sahyo]
Fiksi PenggemarPark Jihyo es una abogada exitosa con una visa aburrida, su matrimonio se está cayendo a pedazos y hasta ahora, su hija es lo único manteniéndola a flote Justo cuando piensa que tendrá que vivir así por el resto de su vida, alguien llega a ella par...