El sonido de un despertador invadió la habitación de Boyfriend. Con los ojos aún medio cerrados, apagó el estruendo y se sentó en el borde de la cama, estirándose perezosamente. La luz del sol se filtraba por las persianas entreabiertas, y el eco de la rutina matutina lo rodeaba, pero había algo... distinto. Giró la cabeza hacia la almohada de al lado y notó que Girlfriend no estaba.
"¿Dónde estará?" pensó, levantándose de la cama. La casa estaba inusualmente silenciosa, como si faltara algo esencial. Revisó cada rincón, pero no había señales de ella. No había dejado una nota, ni un mensaje en su teléfono. Boyfriend se encogió de hombros, pensando que tal vez había salido temprano a hacer algún recado.
Después de vestirse con su atuendo habitual-gorro rojo hacia atrás, camiseta blanca-decidió que un paseo por la ciudad podría despejarle la mente.
La ciudad, llena de ruido y vida, lo recibió con la acostumbrada amalgama de sonidos: autos, personas conversando y el ocasional altavoz con música retumbante. Boyfriend caminaba sin rumbo fijo, simplemente disfrutando el día. Pasó por una plaza donde los niños jugaban, y por una tienda de discos donde solía comprar música con Girlfriend. Pero a pesar de la normalidad aparente, algo en el aire lo incomodaba.
Mientras seguía caminando, el paisaje urbano cambió. Sin darse cuenta, había llegado a una parte más desolada de la ciudad, cerca de los callejones donde las sombras parecían más densas. Justo cuando estaba por girar y regresar a una zona más concurrida, algo lo detuvo.
Una figura salió de las sombras del callejón, con una sonrisa siniestra y una chaqueta morada con amarillo. Boyfriend reconoció al instante a Darnell, uno de los amigos de Pico. Su mano estaba metida en el bolsillo, y sus ojos parecían evaluarlo como si fuera una presa fácil.
-Vaya, vaya... Mira quién se ha perdido -dijo Darnell, con su tono burlón. Antes de que Boyfriend pudiera responder, una segunda figura apareció desde detrás de un cubo de basura. Era Nene, cuchillo en mano, con una expresión de diversión macabra en su rostro.
-Hace tiempo que no hacemos esto, Darnell -rió Nene, jugueteando con el cuchillo mientras lo miraba de arriba abajo-. ¿Cómo prefieres que lo hagamos, rápido o lento?
Boyfriend tragó saliva. No estaba acostumbrado a este tipo de situaciones, pero algo en la forma en que ellos se movían le indicaba que no era una simple amenaza. Ellos estaban ahí por algo más.
-¿Qué... qué quieren? -preguntó, intentando mantener la calma. Pero el sudor en su frente traicionaba su nerviosismo.
Darnell se rió suavemente mientras sacaba una pistola, que hasta ese momento había estado oculta bajo su chaqueta.
-Tu cabeza. El papá de tu noviecita ofreció una buena cantidad por ella -dijo Darnell, acercándose lentamente.
Nene dio un paso adelante, relamiéndose los labios.
-Lo que hace la gente por dinero, ¿no? -añadió ella, jugando con el filo de su cuchillo.
Boyfriend retrocedió, su mente girando a toda velocidad. Su corazón palpitaba tan fuerte que sentía que lo podía escuchar. Era obvio que ellos no estaban bromeando. Sabía que no podía simplemente correr o enfrentarse físicamente a ellos, pero... había una opción.
-Espera... -dijo, levantando las manos-. No tienen que hacer esto. ¿Por qué no resolvemos esto de otra manera?
-¿De qué estás hablando? -preguntó Darnell, bajando un poco el arma, pero sin perder la precaución.
Boyfriend respiró profundo, su característica confianza en las batallas de rap comenzando a resurgir.
-Un duelo de rap. Ustedes contra mí. Si gano, me dejan ir -propuso, alzando la voz para sonar más seguro de lo que realmente estaba.
Nene y Darnell se miraron, casi divertidos por la sugerencia.
-¿En serio crees que vamos a dejarte ir solo porque ganas una batalla de rap? -rió Nene, aunque sus ojos mostraban una chispa de interés.
-Está bien. Si pierdes, te matamos aquí mismo. Pero si ganas... -Darnell pensó un momento y sonrió-, tendrás unos minutos más de vida antes de que terminemos el trabajo.
Boyfriend asintió. Sabía que era una apuesta peligrosa, pero era su única salida.
Sin perder más tiempo, Darnell sacó un pequeño altavoz portátil y lo conectó a su teléfono, donde comenzó a sonar una pista pesada, cargada de bajos retumbantes y ritmos rápidos. Nene y Darnell se posicionaron frente a Boyfriend, preparados para lo que consideraban una formalidad antes de acabar con él.
La batalla comenzó.
Round 1:
El ritmo era frenético, y Boyfriend respondió con precisión, lanzando notas con confianza. Nene fue la primera en atacar, su rap lleno de amenazas y burlas afiladas como su cuchillo. Boyfriend contrarrestó con su estilo ágil y enérgico, devolviendo cada rima con más fuerza. Pero entonces, Darnell entró en la batalla, su voz grave y letal, cortando el aire con cada palabra. El sudor corría por la frente de Boyfriend, pero no se detuvo. Cada vez que parecía que lo acorralaban, sacaba una nueva melodía, una nueva respuesta.
Round 2:
La presión aumentaba. Boyfriend sabía que no podía fallar, que un solo error podría ser su fin. La música alcanzó un crescendo, y ambos lados parecían estar en su punto máximo. Nene y Darnell se coordinaban, pero Boyfriend seguía adelante, más rápido, más preciso, forzando a sus oponentes a cometer pequeños errores. Sentía la adrenalina en cada fibra de su ser. Estaba ganando terreno, pero el final se acercaba.
Cuando la última nota resonó, Boyfriend se quedó sin aliento. Los ojos de Nene y Darnell mostraban sorpresa. No lo habían subestimado del todo, pero claramente no esperaban que resistiera tanto.
-Maldita sea... -murmuró Nene, apretando los dientes.
-¿Sabes qué? -Darnell se acercó, levantando la pistola de nuevo-. Dijimos que si ganabas, tendrías unos minutos más. Pero la verdad... no creo que puedas correr lo suficientemente rápido.
Boyfriend sintió el frío de la desesperación apoderarse de él mientras retrocedía hacia la pared del callejón. Estaba acorralado, sin salida, y ellos no pensaban cumplir su parte del trato.
-Adiós, chico. -Darnell sonrió, listo para jalar el gatillo.
Pero justo en ese momento, un disparo sonó en el aire, pero no fue de Darnell. Un proyectil golpeó el arma en la mano de Darnell, haciéndola volar.
-¡¿Qué diablos?! -gritó Nene, mirando hacia el extremo del callejón.
De la oscuridad emergió una figura conocida. Pelo naranja picudo, pistola en mano, y esa chaqueta verde que Boyfriend conocía demasiado bien.
-¡Pico! -exclamó Boyfriend, con una mezcla de alivio y sorpresa.
-¿Pensaron que dejaría que mataran a mi mejor amigo? -dijo Pico con una sonrisa desafiante, caminando hacia ellos-. ¿Realmente creen que pueden hacerlo sin que yo intervenga?
Nene y Darnell se miraron, sabiendo que no podían enfrentarse a Pico y salir ilesos.
-Esto no ha terminado -escupió Darnell, mirando a Boyfriend con odio-. Volveremos por ti.
Sin decir más, Nene y Darnell se esfumaron en la noche, dejando a Boyfriend y Pico solos en el callejón.
Boyfriend, aún jadeando, se dejó caer contra la pared. Pico se acercó, ofreciéndole la mano.
-Hace tiempo que no nos vemos, ¿eh? -dijo Pico con su típica sonrisa.
-Demasiado tiempo, amigo -respondió Boyfriend, aceptando la mano y levantándose-. Me alegra verte.
-Igualmente. Ahora vámonos de aquí antes de que vuelvan con refuerzos.
Juntos, salieron del callejón, sabiendo que la ciudad ocultaba muchos más peligros de los que se imaginaban...
Primer capítulo de este libro que hago meramente por diversión, tenía otra cuenta pero... fue hackeada y borro todos mis libros, aprovechando la resurrección de fnf aproveche a volver a este fandom, espero les guste...
ESTÁS LEYENDO
Ritmo entre Sombras - [Friday Night Funkin']
FanfictionDespués de años de enfrentamientos, éxitos musicales y una relación estable con Girlfriend, Boyfriend pensaba que lo peor había quedado atrás. Pero su vida da un giro inesperado cuando despierta en su ciudad solo, sin rastro de su novia, y con una a...