Adios mi Amor

Capítulo 37

Slater se quedó sorprendido. Pronto, se recompuso.

"¿Qué te pasa, hermano? ¿Por qué te enojaste de repente? Solo estoy tratando de ayudar."

Marco respiró hondo y se pasó los dedos por el cabello. No sabía qué le pasaba. La imagen de Loraine con Cayson le causaba mucha incomodidad.

De repente, Slater apuntó hacia el primer piso y gritó:

"¡Hey, mira allí! Esa mujer se parece mucho a tu exesposa, Loraine."

Marco y Jimmie miraron en la dirección que su amigo señalaba, solo para encontrar a Loraine cerca de un hombre extraño.

"Ahí la tienes, Marco. ¿Ves por qué te dije que no le des nada? Es una puta. Tu divorcio apenas tiene una semana, pero ya está seduciendo a diferentes hombres por dinero. ¡Qué asco!"

Slater miraba a Loraine con desdén.

Los ojos de Marco se oscurecieron de repente.

Se puso de pie y se alejó.

Sus amigos lo miraron con confusión.

De vuelta en la esquina aislada de abajo, Barry continuaba aprovechándose de la situación.

Los otros empleados del departamento estaban de fiesta a lo lejos. Probablemente no vieron lo que estaba sucediendo, o cerraron los ojos a propósito.

Loraine ya no iba a tolerarlo más. Introdujo su mano en su bolso.

Había traído un frasco de gas pimienta. Ahora, quería rociarlo en los ojos de ese hombre repugnante.

Barry no se daba cuenta de lo que estaba a punto de suceder. La mirada fría en el rostro de Loraine lo excitaba aún más. Estaba ansioso por romper su determinación pronto.

Justo cuando se acercó para tocar la cara de Loraine, sintió un dolor agudo en su brazo. Miró hacia abajo y solo encontró una mano grande que lo apretaba sin piedad.

Antes de que pudiera defenderse, fue lanzado a unos tres metros de distancia.

"¡Ay!"

Barry gritó de dolor al chocar contra el duro suelo. La copa en su mano se rompió en pedazos, y el vino se derramó por el suelo.

Con la boca abierta, Loraine miró hacia arribaal hombre que había lanzado a Barry. Se quedó aún más sorprendida al ver surostro.