Los 11 Corazones |⚡| Inazuma Eleven

FF - #005

Al día siguiente...

Casa de los Abuelos Blaze, Ciudad Inazuma

Narra: Axel Blaze

Julia: ¡Hermanito! -corrió hacia mí mientras me agachaba para atraparla en un abrazo. -¡Papá y yo iremos a verte para animarte en la final de mañana! ¿A que es genial?

Axel: ¿En serio? -me asintió con euforia. Saber que mi padre y mi hermana menor vendrán a animarme me hace sentir muy feliz.

Julia: ¡Así que mañana, dalo todo! ¡Mete uno de tus supergoles!

Axel: Claro que sí. Te lo prometo.

Julia: ¡Bien! ¡Jajaja! -se separó de mí para saltar y bailar. -¡Mañana mi hermano ganará la final!

Axel: Ten cuidado, Julia. No te alejes tanto.

Julia: ¡Pero si no va a pasar nada, Axel!

Axel: ¡Espera, Julia, no corras! -empezó a correr de repente, alejándose cada vez más de mí. Fue entonces que escuché el pitar de un camión por donde corría Julia. -¿Pero qué? ¡Julia, espera! ¡Apártate de ahí! -intentaba correr hacia ella pero no podía. Era como si algo me impidiera avanzar. -¡Julia! ¡Julia! -empecé a entrar en pánico, el camión estaba más cerca de ella. -¡JULIA!

Desperté de golpe, sentándome para poder regular mi respiración. Llevé mi mano a mi pecho, sintiendo lo agitado que está mi corazón.

Axel: Una pesadilla... Sólo fue una pesadilla... -puedo sentir el sudor frío deslizarse por mi cuerpo. -Sólo una pesadilla... -me fijé en la hora que era, desperté antes de que sonara la alarma que había programado ayer.

Me levanté de la cama y me dirigí al cuarto de baño. Tomé una ducha fría para poder calmarme por completo. Estuve unos buenos minutos bajo el agua hasta que oí la alarma activarse. Salí y apagué el despertador.

Axel: ... -me acerqué a mi escritorio y tomé la fotografía que tenía sobre este, miraba a mi hermana pequeña y a mi madre en ella. -*No hay mucha diferencia entre la realidad... y esa pesadilla.*

Mi mirada pasó a fijarse en mi uniforme del instituto; lo más seguro es que hoy sea mi último día usándolo y también mi último día en el Kirkwood, es lo mejor. Comencé a cambiarme y a prepararme para bajar a desayunar con mis abuelos. Antes de bajar, revisé si se me olvidaba algo.

Axel: Por poco... -agarré la carta de renuncia que escribí y la guardé en mi bolso. Tras asegurarme que nada se me quedaba, salí de mi habitación y me topé con mi abuelo. -Buenos días, abuelo.

???: ¡Buenos días! ¿Cómo dormiste?

Axel: Ah... Dormí bien, sí. -no le diré que tuve una pesadilla, no resuelve nada. El abuelo golpeó suavemente mi espalda.

???: Hay que dormir bien y desayunar bien para poder tener energías y enfrentarse al mundo. Vamos, tu abuela ya tiene listo el desayuno. ¡Ay, que haría yo sin esta mujer en mi vida! -no pude evitar reír un poco por su comentario. El abuelo ama mucho a la abuela. -¡July, mi vida! ¡El niño está despierto!

Axel: Buenos días, abuela.

July: Bueno días, cariño. -se me acercó y besó mi frente. -Debes tener hambre, siéntate.

???: ¿Y para mí no hay besito? ;-;

July: Tú cállate y siéntate a desayunar, Caxel. Estás muy viejo para ser tan dramático.