Una huida inesperada,

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Durante el crudo invierno de 1942, un T-34 dirigido por el capitán Gavril Polovchenia quedó atascado en un río cerca de la ciudad de Andreapol. La tripulación esperaba refuerzos cuando los alemanes llegaron y rodearon el tanque.

Polovchenia ordenó a su tripulación que no hicieran ruido, aunque era muy difícil hacerlo con tanto frío en un T-34 completamente congelado.Aunque los alemanes no pudieron abrir la escotilla, decidieron que el tanque había sido abandonado y lo sacaron del agua. El 15 de enero, los germanos enviaron el T-34 de Polovchenia a Andreapol, mientras que la tripulación en el interior seguía guardando un silencio absoluto.

A las 5 de la mañana siguiente, el tanque soviético intentó escapar. Salió a la fuerza por las calles de la ciudad, disparando y, aplastando al enemigo, desorganizado y en estado de shock. Más de 20 soldados, 30 coches y camiones militares, además de 10 cañones de artillería fueron destruidos cuando el tanque se dirigió a las posiciones soviéticas.

Además, los alemanes quedaron tan conmocionados que no pudieron resistir adecuadamente al avance de las tropas soviéticas, que liberaron fácilmente andreapol el mismo día

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⏰ Última actualización: Oct 18 ⏰

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T-34 (lo que se siente estar en un tigre de acero)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora