te amo

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Yeimy

Ya se había hecho de noche, y seguía en el estudio, intentando acabar de arreglar algunos detallitos que faltaban para que mi nueva canción quedara perfecta. Llevaba toda la tarde con esto, incluso le dije a Marino, que me estaba ayudando con la canción, y a todos los del equipo que ya se fueran, porque ya era tarde, se habían pasado más rato del que debían.

Suspire y tiré mi espalda contra la silla agotada. Gire mi cabeza, hacia la puerta cuando esta se abrió, dejando ver a mi novio bostezando por causa del cansancio. Hacía semanas que no parábamos de camellar, veníamos desde temperano y nos íbamos a la casa, cuando ya era de noche.

- Amor, vamos para la casa ya, es tarde. - me dijo cuando llegó delante de mí, apoyándose en la mesa.

- Uff, todavía me queda, pero si querés anda vos.

Me ofreció su mano para que la tomara y así levantarme, y eso hice. Haciendo que quedara delante suya. Charly pasó sus brazos por mi cintura, y yo por su cuello, uniendo nuestros labios en un beso lento, o bueno eso creía hasta que empecé a sentir la mano de Charly bajar hacia mi trasero.

Despegué mis labios de los suyos cuando el beso subió de tono.

- Charly... aquí no. - decía mientras se relajaba mi respiración.

- Relájate princesa, estamos solitos. - dijo uniendo nuestros labios.

Pero antes de que me subiera encima de la mesa, me volví a separar.

- Charly, vos no estabas cansado pues... - dije con mi respiración agitada.

- Estaba... ahora como que tengo ganas de otra cosa...

Paso sus manos por mis piernas, haciendo que rodeara su cadera con ellas. Me dejo en la mesa mientras que seguíamos besándonos, yo ya me iba a dejar de contener porque yo también quería esto. Pero de repente recordé algo, que hizo que me separara de golpe del beso, aunque todavía con mis brazos en su cuello y sentada encima de la mesa.

- Charly las cámaras.

- Y qué pasa pues? - dijo a punto de besarme de nuevo.

- Como que que pasa? - dije alejando un poco mi cabeza hacia atrás para no corresponder el beso.

- Mira... mi reina, que nos graben, igual nadie las puede ver... aunque los únicos que pueden verlas son los dueños de este chuzo,... y adivina... somos vos y yo. Así que, no hay problema.

Volvió a besarme y pasó sus manos por encima de mis piernas cerca de mi intimidad, eso hizo que mi piel se erizará, y olvidará por completo las cámaras, ahora lo único que quería, era a él.

Comenzó a subir una mano por mi muslo, por dentro de mi falda, llegando a mi intimidad, y empezó a mover sus dedos en círculo todavía con mi panty puesto. Salían gemidos de mi boca, que eran callados por los besos que Charly me estaba dando.

Tire mis tacones al suelo, nos separamos del beso y mi novio, me quitó mi panty. Agachó su cabeza a la altura de mi intimidad, pero antes de hacer cualquier cosa me miró a los ojos, y yo con desespero le metí la cabeza en mi intimidad para que empezara.

Me la chupaba y besaba, y se sentía como si estuviera en el paraíso. Levantó mi pierna un poco, para tener más acceso, y eso fue mi perdición porque a los segundos me corri en su boca, soltando un fuerte gemido.

Se levantó y se pasó el pulgar por la boca con cara de prepotencia. Mis piernas todavía seguían temblando, pero eso a mí no me importaba, yo lo quería ya dentro de mi.

Volvió a besarme, haciendo que me probara a mí misma. Comencé a desabrocharle el pantalón con desesperación, agarré su miembro con mi mano para comenzar a moverlo de arriba hacia abajo. Segundos después lo dirigí a mi entrada, hundiéndome en el de golpe, ya que estaba muy mojada. Íbamos lento para que me acostumbrara al tamaño, y los gemidos de mi boca, aumentaban poco a poco.

Dejo de besarme, para besar y lamer mi cuello, diciéndome cosas al oído que me hacían perder el control. Agarró mi cabello en una coleta con una sola mano estirando un poco de él.

Este hombre sabía cómo volverme loca.

Volvió a besar mis labios, y nuestras lenguas luchaban por estar en la boca del otro.

Me soltó el pelo y con sus dos manos apretó mis pechos por encima de mi camiseta. Dejo de besarme para dirigir sus labios a uno de mis pechos, movió con su mano mi camiseta y sujetador para meter su boca. Succionaba y besaba, que rico que se sentía. Luego hizo lo mismo con el otro.

Los dos no aguantábamos más, estábamos apunto de explotarlo explotar. Lo empuje de mi, haciendo que cayera en la silla y saliera de golpe, y además que pusiera una cara como de que no entendía nada.

Me bajé de la mesa y me monté encima de él, empezando a saltar desesperada arriba de él. Charly apretó mi trasero, lo que hizo que me corriera y soltara varios gritos. Él lo hizo a los segundos. Me dejé caer encima de él, con mi cabeza en su hombro, intentando controlar la respiración.

A los minutos, decidí levantarme a pesar de que todavía mis piernas temblaban. Nos limpiamos como pudimos, luego en la casa nos ducharíamos. Y arreglamos nuestra ropa dejándola como estaba al principio antes de que pasara nada.

Me volví a sentar en la mesa, ya que mis piernas no aguantaban de pie.

Charly abrió mis piernas con sus manos para meterse en ellas. Me dio un beso agarrándome de las mejillas.

- Te amo - dijo cuando se separó.

Le sonreí y le volví a besar.

- Dale pues, vayámonos para la casa.

No le iba a reclamar nada ya que estaba cansada, y con la actividad de hace unos minutos, todavía más.

Me bajé de la mesa y fui a buscar mi bolso, después fui a la puerta principal que es donde me esperaba mi novio para irnos a nuestra casa. Cerramos la productora y eso hicimos.

Llegamos de Soul and Bass, y me metí a la ducha mientras que Charly preparaba la cena. Comimos y rato después yo me puse a leer mientras que Charly se duchaba.

Aunque no sirvió de mucho, ya que luego volvimos a hacer el amor, bueno, unas cuantas veces más.

Nuestro destino siempre fue amarnos (One Shorts)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora