Entre Nosotras

CAP 2 (acurrucadas)

BILLIE'S POV
Me desperté con un dolor de cabeza punzante, y por un momento no tenía idea de donde estaba. Las sábanas eran suaves, y la luz que entraba por la ventana mi hizo entrecerrar los ojos. Miré a mi alrededor y noté que esta no era mi habitación. Me tomó unos segundos darme cuenta de que estaba en la cama de lana.

Me incorporé lentamente, sintiendo cómo el mareo me invadía. Mi ropa estaba desordenada, y mi mente era un completo caos. No recordaba mucho de la noche anterior, solo fragmentos borrosos. Caminé hacia la puerta, un poco tambaleante, y me dirigí a la cocina.

Ahí estaba Eliza, sentada en la mesa con una taza de café entre las manos. Me miro en cuanto me vio entrar y sonrió.
-Buenos días- Me dijo, con esa voz suave y tranquilizadora que siempre tiene.

-¿Cómo llegue aquí?- Pregunté, frunciendo el ceño, intentando juntar las piezas.
-¿Y donde esta Mon?

Eliza dejó su taza en la mesa y me explico con calma
-Ayer en el bar te emborrachaste mucho, Billie. Mon tuvo que irse antes de que se complicara más, y yo no iba a dejarte sola allí, así que te traje a mi casa.

Me senté en una de las sillas, asimilando lo que decía. Mi mente estaba completamente nublada, trataba de recordar algo de lo que había pasado, pero todo era un vacío. -No me acuerdo de casi nada... -Murmuré mientras miraba el desayuno en la mesa.
Eliza se levantó.
-Voy a darme una ducha. Ponte cómoda -Me dijo antes de dirigirse hacia el baño.

Me quede sola, con la cabeza apoyada en la mano, intentando recordar detalles, Lo único que venía a mi mente era el bar, las risas, y el momento en que Mon y yo empezamos a beber más de la cuenta. Pero más allá de eso era un vacío absoluto. Tomé un poco del desayuno que Eliza había dejado, pero mi mente seguía vagando en ese espacio incierto.

Después de unos minutos escuche la puerta del baño abrirse, y vi a Eliza salir, envuelta en una toalla, secándose el cabello. Caminaba hacía su habitación, y, sin querer, noté que la puerta quedo entreabierta cuando entró.

No puede evitar echar un vistazo. Vi cómo se movía con naturalidad por la habitación, buscando ropa para vestirse. Observé su silueta y pensé en lo hermosa que era Eliza. Había algo en la manera en que todo en ella parecía siempre perfecto, sin esfuerzo. Me quede ahí, mirando sin querer apartar la vista, hasta que de pronto ella se giro.

-¡BILLIE!-Eliza se sobresalto al verme en la puerta.
Rápidamente tomó una camisa y se la puso.
-¿Qué haces aquí?-Me preguntó, aún sorprendida.

Sentí cómo el calor subía por mi rostro. No quería que supiera que la había estado mirando.
-Ah...lo siento, solo...iba al baño. No era mi intención hacer esto. - Mentí, aunque sabía que algo dentro de mi sí lo había deseado.

Eliza me miró, tratando de descifrar lo que realmente estaba pasando por mi mente.
-Está bien... Solo, la próxima vez, toca la puerta. -Dijo, medio en broma, aunque había un todo de incomodidad en su voz.

Asentí, intentando no parecer más culpable de lo que ya me sentía. La verdad era que no entendía por qué me había quedado mirándola de esa manera, pero algo en mi había cambiado, algo que no podía ignorar. Me quedé en la puerta unos segundos más, sin saber qué decir, hasta que finalmente di media vuelta y salí de su habitación, mi mente hecha un torbellino.

ELIZABETH'S POV (LANA)
Terminé de vestirme, tratando de sacudirme la confusión de lo que acababa de pasar. Me dirigí a la cocina y allí encontré a a Billie, sentada en la mesa con su celular en la mano. El ambiente era tenso, y el silencio que se instaló entre nosotras era palpable.

Decidí romper el hielo.
-Oye, Billie...¿Recuerdas si te besaste con Mon anoche? - Pregunté, intentando sonar casual, pero mi voz traicionó un atisbo de inquietud.
Ella levanto la mirada, claramente sorprendida.
-¿Qué? No, no recuerdo eso en absoluto. - Respondió, sus ojos llenos de confusión.
-¿Por qué lo hicimos?

Mi corazón se encogió al recordar lo que había visto en el bar.
-No lo sé. Estaban ambas bastante borrachas anoche. - Le dije tratando de sonar despreocupada, pero una parte de mí estaba enredada en la incomodidad de la situación.

Billie asintió lentamente, como si estuviera procesando la información.
-Vaya... -Murmuró, mirando hacía abajo, su expresión se volvió un poco sombría.

Decidí que lo mejor sería alejarme un momento de la situación.
-Voy a mi habitación a intentar dormir un poco, - Le dije
-¿Quieres un café o algo?

-Estoy bien, gracias. - Contestó ella, sin apartar la mirada de su celular. Así que me retiré, cerrando la puerta tras de mí.

Me deje caer en la cama, pero el nudo en mi estómago no me dejaba descansar. Mi mente seguía dando vueltas en torno a la imagen de Billie y Mon juntas. no podia ignorar el pequeño destello de celos que había sentido al verlas besarse.
¿Por qué me molestaba tanto? había algo más profundo, un sentimiento que no podía evitar.

Después de intentar de encontrar algo de paz mental, me levanté, sintiendo que necesitaba ver a Billie nuevamente.
Caminé hacia su habitación y, al entrar la vi tumbada en la cama, aún concentrada en su teléfono.
-¿Puedo acostarme un momento? - Le pregunté, sintiéndome un poco vulnerable.
-Claro - Dijo ella, moviéndose para darme espacio. Me recosté a su lado, y en un impulso natural, la abracé. Fue un gesto instintivo, como si mi cuerpo supiera que necesitaba de su cercanía.

Al principio Billie pareció sorprendida, pero luego se relajó y correspondió al abrazo.
-¿Estas bien? - Me preguntó con voz suave.
-Sí, solo... un poco aturdida -Respondí, sintiendo que la calidez de su cuerpo me tranquilizaba.

-Solo quería estar cerca de ti...

La conexión entre nosotras en ese momento se sentía intensa. El mundo exterior se desvaneció, y me deje llevar por la paz que me brindaba estar a su lado. Mientras la miraba, noté cómo su respiración se volvía más regular y, poco a poco, se quedo dormida.
Me quedé observándola, y una oleada de afecto me invadió. No podía evitar sonreír mientras la miraba, a pesar de la confusión y el desasosiego que había sentido antes, aquí y ahora, todo lo que deseaba era estar con Billie, sin pensar en lo que había pasado.

El tiempo pasó, y seguí acurrucada a su lado, disfrutando de su compañía. Había algo especial en esos momentos de silencio compartido. Pero, en el fondo, la inquietud regresó a medida que los recuerdos de la noche anterior volvían a mi mente. ¿Qué significaba todo esto? ¿Cómo llegue a sentirme así?

Con esos pensamientos en la cabeza, cerré los ojos y traté de relajarme. Quizás, solo quizás, esta conexión que estaba surgiendo entre nosotras era algo que valía le pena explorar. Sin embargo, por ahora, me dejé llevar por la tranquilidad del momento, disfrutando de la cercanía de Billie mientras el mundo seguía afuera.

OIGAN A LANA LE SIGO PONIENDO ELIZA O ELIZABETH O SIMPLEMENTE LE PONGO LANA???
😉😉😉