⭒۟A M N M M, G A & A S C C𔘓 XiCheng

Recuerdos.

— Lo llevaré conmigo.

La declaración de Jin Ling preocupó a todos.

— Líder Jin, eso no es posible, WanYin estaría en constante peligro-

— ¿Cómo Gusu puede ser más seguro que mi secta? Incluso Yunmeng sería más apto para que él se quede ahí. —en su opinión creía que la gente de Yunmeng, en especial en quienes más confiaba su tío lo ayudarían a encubrir la verdad por un tiempo.

— Líder Jin, no puede exponerlo ante los discípulos de Yunmeng.

— ¡No voy a hacerlo! —sintió que HanGuang-Jun y el líder Lan no creía en él y su fuerza para proteger a esa persona—. Solo daré una explicación sobre una maldición que tiene mientras ambos buscamos algo relacionado del porque terminó aquí.

— Puedes ponerlo en peligro Jin Ling, no es un cultivador como nosotros. —se preocupó ante la idea de que este Joven parecido a su hermano marcial saliera lastimado por un descuido.

— Voy a estar con él, no lo dejaré solo. —empezó a molestarse, parecía que nadie confiaba en él y que sólo lo veía como un niño.

— No puede dejar de lado su posición como líder. —creía en el Joven Jin pero su posición como líder consumiría su tiempo y algún momento quitaría sus ojos del Joven y solo estaría intranquilo.

— Puedo encargar un tiempo mi liderazgo, lo más importante para mí es traer de vuelta a mi tío y esa será mi prioridad.

La discusión por ver quién se encargaría de cuidarlo lo hizo sentir incómodo, en esa habitación parecía que su opinión no importaba y que sólo tenía que hacer lo que se le dijera, era como un objeto falsificado que nadie quería y esperaban lograr devolverlo a su sitio original para traer de vuelta al invaluable objeto que se les fue de las manos.

Removiendose en su lugar fuera de la habitación miró el paisaje para distraer su atención y no pensar que en ese lugar su existencia tampoco era deseada. Perdido en sus pensamientos no vio el movimiento de algo peludo acercarse y solo cuando sintió algo pesado en uno de sus muslos noto la cabeza de un perro que lo miraba como si pidiera atención.

Sin prestar atención a las voces de las personas que seguían discutiendo a unos metros frotó la cabeza del perro y disfruto la forma en que esté parecía complacido con su toque, el miedo y preocupación se desvanecieron un poco.

Recordó entonces que siempre había querido tener un perro pero en el lugar donde vivía no se permitía tenerlos por lo que solo veía a la distancia como las personas paseaban a sus mascotas en un parque cercano donde iba en secreto para despejar su mente.

— Su nombre es Hada.

La voz baja de XiChen apenas fue audible ante los gritos de Jin Ling, Wei WuXian y Jing Yi, mientras que Lan WangJi y Lan Si Zhui trataban de calmarlos. No supo cuando el Lan llegó a su lado fuera de la habitación de Lan WangJi para saber el veredicto al que todos llegaron.

— Es un perro espiritual.

— ¿Espiritual? —su mirada no se apartó de Hada quién estaba más que cómoda estirando su cuerpo y poniendo su cabeza y patas delanteras sobre su regazo. Con la misma voz baja XiChen le dio detalles de los animales espirituales de ese mundo e incluso tomó asiento a su lado pero eso no era lo que le importaba—. ¿No correrían riesgo de ser atacados? ¿Y si alguien los lastima en medio de una batalla sin querer?

— Ellos son muy listos, me atrevería a decir que incluso más que nosotros. —el rostro preocupado del Joven solo dejaba ver el gran corazón que tenía aunque siempre intentaba ocultar esa faceta—. Hada ha pasado por mucho entrenamiento y por muchas batallas al lado de Jin Ling y nunca ha tenido una herida profunda, solo uno que otro golpe pero nada muy serio.