XXX🦋
El coche de sus padres se detuvo ante el gran bosque, el último viernes de cada mes la reunión habitual de la manada era obligatoria, todos los lobos sin importar su rango se presentaban en aquel rincón macabro como Jimin solía llamarlo.
La reserva era un espacio cuidadosamente controlado, los alrededores eran seguros y adecuados para explorar, aunque los árboles eran enormes y en lo profundo del bosque podían encontrar animales extrañamente tenebrosos.
Las reuniones eran principalmente para convivir con los líderes y para mantener la unión de la manada, muchos de ellos tomaban la oportunidad para liberar a su lobo y despejarse del mundo humano, lo que no aplicaba en el caso de Jin, para el, era acoplar el mundo humano al mundo salvaje.
-¿Ya tienes todo? -su madre pregunto en cuanto Jin se bajo del coche, ella era la persona más organizada de la manada, todo lo contrario a él.
-Si, mamá -contesto con molestia, su humor en los últimos días era extraño y su rebeldía comenzaba a desarrollarse sobre todo con sus padres.
-¿Revisaste bien.? -volvió a cuestionar.
-Si, revise antes de salir y cuando estábamos de camino, ya tengo todo, cálmate -refunfuño de modo evasivo.
-No me pidas que me calme jovencito, ¿ya olvidaste lo que pasó el mes pasado? - Jin rodó los ojos al escuchar que mencionaba aquello de nuevo.
No había dejado de mencionar el absurdo incidente ocasionado por su rubio amigo, quien insistió en escabullirse por el bosque para tomar el sol en el risco, estando ahí, Jin no se percató de la falta de bloqueador, ocasionando algunas quemaduras en su piel, aún tenía marcas que le recordaban el protector solar.
-Eso fue culpa de Jimin -se excusó rápidamente.
-Tú decidiste que era una buena idea, así que no lo culpes por todo -saco una botella de protector solar, pero Jin no la tomo.- Amor, debes entender que tu piel es más delicada.
-¡Ya lo sé mamá!, solo paso una vez.-Asegúrate se que no vuelva a pasar -insisto y Jin no tuvo más remedio que tomarlo.-También te traje un lindo gorro -lo extrajo de su bolso y el rostro de Jin mostró indignación, el estampado era tan infantil que casi alcanzaba lo ridículo.
-¡Mamá¡-se quejó.
-Solo póntelo -insistió, pero se negó enseguida.
-Ya déjalo mujer -su padre intervino como era de costumbre. -ya no es un niño, anda Jin, ve con tus amigos, nosotros nos instalaremos.
-Gracias -tomo su mochila y evitando el espantoso gorro comenzó a alejarse
-¡Ten cuidado y no te alejes de Jungkook ¡- le ordenó su madre, el alfa solía ser quien los mantenía a salvó.
-¡No lo haré!
-¡No escuches a Jimin!- agrego.
El Omega por otro lado siempre buscaba formas de meterse en problemas y por obvias razones termina arrastrando a sus dos compañeros de vida, aun así no había forma de que la alfa se enojara con él, el pequeño era muy tierno.
-¡Si mama! -acelero el paso antes de que logrará decir otra cosa, cada mes era la misma situación, estaba cansado de que lo cuidaran tanto, había veces que su madre exageraba, ya había sobrevivido 17 años siendo solo un humano, podía sobrevivir unos años más.
Paso algunos autos y se adentró al bosque, sus padres tenían un alto rango en la manada, por lo que se podían estacionar más cerca del campamento, no muchos tenían ese privilegió, en su mayoría solían aparcar a kilómetros y la caminata era absurdamente larga.
ESTÁS LEYENDO
Amor Feroz.
FanfictionEres mi refugió seguro, donde puedo amar sin temor a ser juzgados.